El niño misionero Santino Rzesniowiecki, de siete años, continúa su tratamiento contra la leucemia linfoblástica aguda en Singapur. Tras recibir la alta hospitalaria, el equipo médico decidió realizar una nueva infusión de células T provenientes de su padre, con el objetivo de reforzar la médula ósea tras el trasplante.

Actualmente, Santino presenta restos de cuatro médulas en su organismo: un pequeño porcentaje del donante anterior, otro mínimo del cordón umbilical, parte de su médula original, y una presencia significativa de la médula de su padre, que muestra mayor efectividad. Los especialistas buscan que esta última se establezca de manera definitiva para mejorar su estado de salud.

La familia enfrenta nuevos costos derivados del tratamiento, que ascienden a 30 mil dólares solo esta semana, sumados a una factura anterior de 127 mil dólares, de los cuales pudieron abonar parcialmente. Por ello, solicitan ayuda para sostener el proceso.

Santino permanece en tratamiento ambulatorio, alimentándose, descansando y recuperándose paulatinamente. Debido a que su sistema inmunológico aún está débil, se mantiene resguardado, evitando la exposición al sol y la concurrencia a espacios públicos.

El avance del tratamiento representa una esperanza para la familia, que considera fundamental el desarrollo de terapias como la que recibe Santino en Argentina, donde aún no se implementan tratamientos avanzados como el CART-T, disponibles desde 2021 en países como España y Estados Unidos.

Los familiares y allegados invitan a colaborar a través del alias AMORPORSANTINO.ARG. Las donaciones pueden realizarse a nombre de Érico Oscar Rzesznowiecki, padre de Santino, para ayudar a cubrir los costos del tratamiento. También se pueden sumar difundiendo su historia en redes sociales para alcanzar mayor alcance y apoyo solidario.