(CNN) — El hombre vestía ropa camuflada, con una larga barba sobresaliendo debajo de una máscara. Sus rasgos estaban ocultos, pero cuando la policía de Nueva Zelandia vio el video que mostraba a tres figuras caminando detrás de él, un nombre vino instantáneamente a la mente.
El fugitivo Thomas Callam Phillips ha estado evadiendo a la policía durante tres años desde que desapareció con sus hijos Ember, Maverick y Jayda, ahora de 8, 9 y 11 años, en el agreste entorno de la Isla Norte del país en medio de una difícil separación familiar en diciembre de 2021.
Al principio, Phillips era buscado por no presentarse en la corte por cargos de malgastar recursos policiales. Sin embargo, tres años después, su lista de cargos se ha ampliado y se ha vuelto más seria, con acusaciones de que robó un banco en mayo de 2023 con una cómplice no identificada.
La policía ha movilizado equipos de búsqueda, helicópteros y aviones para investigar avistamientos esporádicos, pero no han logrado encontrarlos.
Se cree que el avistamiento de la semana pasada es el primero de los tres niños desde 2021.
Fue realizado por un adolescente, que no quiso ser nombrado ni entrevistado para esta historia, pero su abuelo John McOviney dijo a CNN que el niño había estado cazando con un amigo en la propiedad de 3.439 hectáreas (8.500 acres) de la familia en Marokopa, cuando vieron a cuatro figuras cargando mochilas, y asumieron que eran cazadores furtivos.
“El tipo tenía una barba grande y larga, y los niños estaban todos enmascarados. Llevaban mochilas, y no estaban muy interesados en hablar en absoluto”, dijo McOviney.
Su nieto los filmó con su teléfono, proporcionando lo que se supone es la primera prueba de vida de los desaparecidos niños Phillips que su madre Cat ha visto desde que se fueron.
Todo el país quiere saber dónde están y por qué la policía está tardando tanto en encontrarlos.
“No estamos hablando de un país grande”, dijo Lance Burdett, un exinspector detective y negociador principal de crisis de la Policía de Nueva Zelandia. “Es muy sorprendente que no los hayan encontrado, especialmente dado que el número de avistamientos está en un área muy similar”.
Max Baxter, alcalde del distrito de Otorohanga que incluye Marokopa, una comunidad rural con menos de 100 personas, dice que las autoridades creen que Phillips está recibiendo ayuda.
“Creemos absolutamente que alguien, o algunas personas, los están ayudando”, dijo Baxter. “Tom todavía tiene un número de seguidores que creen que está haciendo lo correcto para él y sus hijos”.
Una familia desaparecida en un terreno salvaje
La Isla Norte de Nueva Zelandia alberga un paisaje salvaje e impresionante que formó parte del telón de fondo de las trilogías de «El Señor de los Anillos» y «El Hobbit» del director Peter Jackson.
Colinas empinadas con vistas panorámicas descienden hacia profundos valles, salpicados de cuevas cubiertas por un manto de denso bosque. Marokopa es el tipo de lugar donde es fácil perderse, y aún más fácil esconderse.
«Hay una razón por la que la gente vive en Marokopa», dijo Baxter. «Es porque aman el aislamiento. Les encanta el hecho de que están en la costa oeste escarpada, que pueden ir a pescar, que pueden pasar el rato con personas afines».
Phillips creció en la zona y sus padres todavía viven allí en la casa familiar. En una declaración proporcionada a TVNZ el año pasado, su madre negó tener conocimiento del paradero de su hijo y dijo que la familia «no desearía nada más» que el regreso de los cuatro.
No es la primera vez que Phillips desaparece con Ember, Maverick y Jayda. En septiembre de 2021, su coche fue reportado como abandonado en una playa, lo que provocó una gran búsqueda policial por tierra y mar.
Durante tres semanas, un helicóptero de la policía y drones peinaron la costa, mientras los equipos de rescate buscaban en tierra, pero justo cuando la operación estaba terminando, con el temor de que la familia se hubiera perdido en el mar, reaparecieron repentinamente.
Según informes, Phillips dijo a la policía que él y los niños habían estado acampando en el monte. Posteriormente fue acusado de malgastar recursos policiales y se le dio una fecha para comparecer ante el tribunal.
Pero antes de que llegara ese día, desapareció nuevamente con los tres niños. Algunos asumieron que se había «ido al monte» nuevamente y que luego reaparecería, pero esta vez no han regresado a casa.
Tres niños aislados de la sociedad
Ember, Maverick y Jayda tenían solo 5, 7 y 8 años cuando desaparecieron. Durante más de dos años, su madre mantuvo un perfil bajo, emitiendo declaraciones escritas a través de la policía, pidiendo ayuda para encontrarlos.
Pero este junio, se presentó en un emotivo video publicado en Facebook.
«Hola mundo», dijo. «Mi nombre es Cat. Estoy aquí hoy, rogándoles por su ayuda para traer a mis bebés a casa».
La hija mayor, Jayda, acababa de cumplir 11 años. «Ahora será una joven mujer y necesita a su madre», dijo Cat, quien no ha revelado públicamente su apellido. «Ember es asmática, al igual que yo, necesita atención médica que no se puede proporcionar desde el campo».
«Solo puedo imaginar cómo se las arregla Maverick», agregó.
En el momento en que se publicó el video, la policía acababa de ofrecer una recompensa de US$ 48.000 (80.000 dólares neozelandeses) por información que condujera a encontrar a los niños. Surgieron informes de avistamientos, pero sin avances.
La hermana mayor de los niños, Jubilee Dawson, hizo un llamamiento separado en una entrevista el año pasado, compartiendo recuerdos de sus hermanos.
«Jayda es la más extrovertida, definitivamente es la más segura de los tres, le encanta hablar con todos», dijo Dawson en un documental de Mata Reports. «Maverick es más introvertido, diría que es más tímido. Ember es la más joven, y más dulce y alegre».
Dawson teme que los niños ahora puedan estar «traumatizados y asustados» y le preocupa que no sepan que su familia los está buscando.
«Los amamos mucho, y solo estamos esperando que regresen a casa», dijo.
CNN se comunicó con Cat y Dawson, pero no recibió respuesta.
Un presunto robo a un banco
Las autoridades están preocupadas de que Phillips no solo esté ocultando a los niños, sino que también los esté alentando a participar en actos delictivos.
En mayo de 2023, dos personas enmascaradas asaltaron una sucursal del banco ANZ, escapando en una motocicleta con dinero en efectivo. La policía de Nueva Zelandia luego nombró a Phillips como el sospechoso y dijo que fue asistido por una cómplice femenina. Se dijo que ambos estaban armados.
Un testigo dijo a los medios locales que la cómplice era pequeña, «incluso más baja que yo».
Ahora se busca a Phillips por robo agravado, lesiones agravadas y posesión ilegal de un arma de fuego.
Burdett, el exinspector detective, dijo que si Phillips llevó a cabo el robo al banco, sugiere que el padre fugitivo estaba desesperado por dinero.
«Tienen que estar sobreviviendo con algo. Necesitas dinero. No puedes vivir tanto en la tierra, y especialmente con tres niños pequeños», dijo Burdett. «Van a crecer en tres años».
En noviembre de 2023, también se alega que Phillips y un niño no identificado rompieron la ventana de una tienda a las 2 a.m., antes de huir en un cuatriciclo robado. Phillips también ha sido visto en cámaras de seguridad, con el rostro cubierto, comprando suministros en una ferretería.
«Sabemos que Tom ha sido visto en lugares comerciales en toda la región de Waikato disfrazado con varias máscaras», dijo la policía en un comunicado.
Burdett dijo que la policía necesita más recursos para buscar en el área y sugirió que una convocatoria general podría ayudar a aumentar el número de personas en el terreno.
«Entremos y saturemos el área. Estoy seguro de que si le preguntas a muchos lugareños, ¿puedes pasar uno o dos días caminando por estas colinas?, mucha gente lo haría. No solo los lugareños», dijo.
Sin embargo, el alcalde Baxter sugiere que aventurarse en el denso bosque alrededor de Marokopa no es una buena idea para aquellos que no están acostumbrados al terreno.
«Para una persona inexperta allí, podrías encontrarte a dos metros del camino y puede que no encuentres el camino de nuevo», dijo. «Estamos hablando de un bosque muy, muy profundo y un campo accidentado».
¿Han estado viviendo en condiciones difíciles?
La policía de Nueva Zelandia rechazó la solicitud de CNN para una entrevista, señalando las decenas de actualizaciones de noticias que han publicado a lo largo de los años relacionadas con el caso.
Su declaración más reciente dice que el avistamiento «creíble» de Phillips y los niños el 3 de octubre provocó una búsqueda de tres días, pero «no se encontró nada de importancia».
«La policía continúa instando a aquellos en la comunidad de Marokopa a mantenerse alerta y reportarnos cualquier actividad sospechosa, por menor que sea», agregó la declaración.
El alcalde Baxter dijo que la búsqueda había dividido la opinión en la comunidad entre aquellos que creen que Phillips debería entregar a los niños y otros que defienden sus derechos como padre.
Muchos solo quieren que toda la operación policial se detenga, dijo.
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Baxter dijo que le resulta difícil creer que los niños hayan estado viviendo en condiciones difíciles durante tres años en un área frecuentemente azotada por el viento y la lluvia, donde las temperaturas invernales bajan de cero. Por eso cree que Phillips y los niños deben estar recibiendo ayuda.
«Todos lo sabemos, pero se vuelve muy incómodo cuando llueve día tras día tras día», dijo.
«Creo que debe haber un alojamiento para esquiladores, otra casa en algún lugar, un cobertizo de lana donde se hayan refugiado por períodos extensos de tiempo, y les han dado suministros», dijo.
McOviney, cuyo nieto tomó las imágenes más recientes, planteó una teoría similar, señalando que los cobertizos de lana y las casas están salpicados por el área escasamente poblada, utilizados por trabajadores que cuidan el ganado que pasta en las colinas.
«Creo que tienen ayuda. No lo sé con certeza, pero para mantener a niños pequeños así aislados de la familia y de todos los demás, pensarías que necesitarían algo de ayuda, ¿no?»
En su mensaje de video, Cat insinuó que hay resistencia en la comunidad hacia la búsqueda por parte de personas que no creen que sus hijos necesiten ser rescatados.
«Muchos de ustedes dicen que los niños están bien, que están siendo bien cuidados. ¿Cómo lo saben, los han visto, o son solo rumores?», dijo.
«Lo que Thomas está haciendo no está bien. No está bien aislar y controlar. Es negligencia infantil. Es poner en peligro a los niños, nada de esto está bien», agregó la madre.
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