Argentina dejó pasar su primera chance de poner un pie en el Mundial. Arrancó arriba, pero no pudo con el ímpetu de Paraguay, que lo dio vuelta y ganó 2 a 1.
La Selección Argentina no pudo con las ganas, el estudio y el fútbol de Paraguay, que se hizo fuerte en casa, remó de atrás y dio vuelta el partido ante los campeones del mundo. Lautaro Martínez, a los 11 de la primera parte, abrió el marcador, pero Sanabria y Alderete lo dieron vuelta para darle vida a los de Alfaro.
Paraguay y Argentina armaron un partidazo en la primera parte. De ida y vuelta, sin un claro protagonista y mucho menos un dueño de la pelota. Las transiciones de un ataque a otro duraron pocos segundos y aquel inicio de dominio de la selección albiceleste se desvaneció cuando los de Alfaro encontraron cómo cortar, por dónde apretar y también lastimar.
Se dio cuenta rápido Paraguay que la presión era hombre a hombre y que los pulmones iban a tener que trabajar al ritmo de las piernas, que nada podía resignarse ante los Campeones del Mundo.
Una de las pocas pérdidas que tuvo el local en campo propio terminó siendo la conquista de la visita. Es que Enzo Fernández, de buen primer tiempo pero pésimo segundo, robó y asistió. Lautaro definió bien en la única que tuvo en la primera parte y llegó el gol, que luego traería el suspenso de Daronco. El VAR se tomó 120 segundos para definir si había off-side o no del delantero argentino. No lo hubo, por lo que la tribuna visitante festejó dos veces la misma conquista.
Presión de Paraguay
Lejos de resignarse, Paraguay aceleró y presionó todavía más. El gol, tempranero de Martínez, encendió la mecha de los paraguayos. El siempre dañino juego aéreo de Paraguay, tuvo premio pocos minutos después. Parecía insinuar el local que iba por el empate, pero la forma fue una sorpresa enorme: Sanabria la agarró de chilena en la puerta del área chica y nada pudo hacer el Dibu Martínez para contrarrestar ese envío. Golazo, empate y partidazo.
Rara fue la imagen del final de la primera parte: Messi, el capitán, y De Paul, su ladero, se quedaron protestando con mucho ímpetu ante Daronco, ese árbitro brasilero al que le cuesta y mucho sacar las segundas tarjetas amarillas o la roja directa. Alderete pegó una y pegó otra. En una se llevó la amonestación, pero en la siguiente, que merecía quizá más la amonestación que en la primera, el brasileño prefirió mirar para otro lado.
Argentina con el pie izquierdo
Argentina, que salió al complemento sin el Cuti Romero y con Balerdi en defensa, sufrió el tremendo cabezazo de Alderete, aquel que debió ser expulsado en el primer tiempo, y arrancó abajo el segundo tiempo.
Con el correr de los minutos, Paraguay ahogó los intentos de Argentina. Le quitó de cuajo la posibilidad del pase en profundidad y lo maniató. Messi, de poca participación, no pudo dejar esos dos o tres en el camino y perdió mucho más de lo que ganó. Enzo, que tan bien había jugado en la primera parte, sintió la presión del mediocampo rival y perdió peso.
Por Emiliano Andreoli (enviado especial de Multimedios a Asunción).