En una entrevista exclusiva con FM Alto Uruguay, la Lic. Claudia Burg, Delegada Regional del NEA en la lucha contra la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a las Víctimas, compartió su visión y los desafíos de su nueva función, en un área tan compleja y sensible como lo es la trata de personas.

Burg, quien recientemente asumió su cargo para las provincias de Misiones y Corrientes, se mostró emocionada y comprometida con su designación. «Estoy muy feliz con esta designación, un cargo que tiene que ver con una problemática muy grave, y que requiere mucha capacitación y sensibilización», expresó.

El trabajo, según explicó, no es sencillo. La trata de personas, que no solo incluye explotación sexual sino también laboral, es un fenómeno complejo que afecta a muchas personas, especialmente en regiones como el NEA, donde las fronteras con otros países juegan un rol clave en el tráfico de personas. «Somos diez u once delegados en todo el país, y mi labor está centrada en la prevención, sensibilización y, sobre todo, en la educación de la ciudadanía sobre esta problemática», dijo.

Aunque ya comenzó a trabajar en noviembre con diversas capacitaciones, Burg destacó la importancia de comprender profundamente las leyes y protocolos que sustentan el trabajo en este ámbito. «Hay cuestiones que son completamente nuevas para mí, y esto requiere formación continua», subrayó.

El rol de la delegada es itinerante, y su presencia en el terreno será clave para establecer redes de colaboración con municipios, fuerzas de seguridad y organizaciones sociales. «Mi trabajo es estar en el terreno, en contacto directo con la gente, con los actores locales, para generar soluciones concretas», indicó Burg. En ese sentido, mencionó que ya ha comenzado a reunirse con autoridades locales, como el intendente de San Javier, para coordinar esfuerzos en la lucha contra la trata.

Un aspecto fundamental de su tarea será la sensibilización y prevención. «El delito que no se comete es el más eficaz», afirmó, haciendo hincapié en la importancia de la denuncia. Para ello, recordó la relevancia de la línea 145, gratuita y anónima, como herramienta crucial para la prevención. «Cualquier persona, desde un ama de casa hasta un chofer de colectivo, debe estar alerta y saber que puede hacer una denuncia anónima si nota algo sospechoso», agregó.

Burg también resaltó que la trata no solo involucra a las víctimas de explotación sexual, sino también a aquellas sometidas a trabajos forzados y al trabajo infantil, una forma de esclavitud moderna que, según ella, afecta gravemente a la Argentina. Además, alertó sobre los diferentes eslabones de la trata, desde la captación hasta la explotación laboral, y la importancia de denunciar situaciones sospechosas antes de que se consumen.

«El trabajo es sensibilizar, educar y formar a la sociedad», expresó la delegada, quien también habló sobre la complejidad del rescate de víctimas y la asistencia a las mismas, mencionando que este proceso está siendo optimizado bajo la actual gestión del gobierno, buscando desburocratizar la ayuda.

En cuanto a su perspectiva sobre el gobierno de Javier Milei, la delegada opinó que, aunque ha sido un periodo complejo para el país, se está viendo un cambio en las políticas públicas y que el trabajo para erradicar la trata de personas y proteger a las víctimas está tomando fuerza en el gobierno actual. «Es un desafío muy grande, pero estoy comprometida con la causa», concluyó.

Claudia Burg dijo tener claro su compromiso: a través de la capacitación, sensibilización y el trabajo conjunto con las autoridades locales y nacionales, espera contribuir de manera significativa en la lucha contra la trata y explotación de personas, un flagelo que afecta a la sociedad en su conjunto