Este 22 de enero se cumple un nuevo aniversario del nacimiento de uno de los artistas más prolíficos de la provincia. Dejó un gran legado musical. Compuso, junto a su hermano Ramón Ayala, canciones que recorren el mundo.
Vicente Cidade fue compositor, violinista y docente misionero. Fue uno de los más prolíficos escritores de nuestra música y cultivó el arte y la enseñanza de la cultura regional hasta su último suspiro. El 22 de enero se cumplen 95 años de su nacimiento.
Fue autor de unas 300 obras, entre las que se encuentran A Misiones mi tierra, Islerita, La perla del Litoral, Mi dulce Anahí, Bajo el sol de Santa Fe, Violín de aguaribay, Vengo del Chaco y Violinero tuyá, y recorrió el mundo con el violín. Su legado será por siempre una de las columnas vertebrales de la música de Misiones. En los corazones de los músicos, escritores y amantes del canto del Litoral resuenan su prosa y pasión por la cultura de la región.
Hermano de Ramón Gumercindo Cidade, más conocido como Ramón Ayala, demostró sus dotes con los instrumentos desde muy pequeño. Juntos compusieron Canción al Iguazú y El mensú, entre otras. Ambas canciones se convirtieron en íconos de la música de Misiones. Fueron grabadas por Los Manseros Santiagueños, Daniel Toro, Los Quilla Huasi, Ramona Galarza, Julio Molina Cabral, Los trovadores y Teresa Parodi, quienes llevaron al mundo el ritmo del corazón del Paraná y el Uruguay.
Una vida de estudio y pasión por la música del Litoral
Inició sus estudios musicales de violín en el Conservatorio Silvestri de la ciudad de Buenos Aires. Luego ingresó al Manuel de Falla. Años más tarde estudió profesorado orquestal en la escuela municipal de Avellaneda. Participó en las orquestas sinfónicas de Buenos Aires, La Plata, La Camerata Mayo y la Sinfónica de San Pablo (Brasil).
Sus primeras grabaciones fueron con el bandoneonista rosarino Damasio Esquivel y Mauricio Valenzuela. En 1965 fue el responsable de la peña folklórica El Hormiguero, escenario al que subieron artistas de la talla de Mercedes Sosa, Argentino Luna, Zamba Quipildor y María Helena. El lugar fue uno de los espacios en los que se promovió a artistas de Corrientes, Entre Ríos y Misiones y sus ritmos tradicionales.
En 1981 se suma al Grupo Purahey, integrado por el acordeonista Héctor Coria, el cantante y guitarrista Jorge Toloza y el guitarrista Esteban Gatti. Con esta formación realizan presentaciones en las principales salas porteñas y grabaciones con un repertorio íntegramente de chamamé.
La docencia como símbolo de la cultura
Tras muchos años de recorrer el mundo, José Vicente Cidade volvió a Misiones en 1985 y se dedicó a la enseñanza de la música. Su primera etapa fue en el Departamento de Música de la Municipalidad de Posadas. Fue uno de los fundadores de la Orquesta Municipal en 1996.
Continuó su tarea en Encarnación (Paraguay), donde dirigió además un coro. Sobre el final de sus años como educador ejerció su pasión en la Dirección de Cultura de Garupá.