Familiares y conocidos de Matías De Olivera (35) aún no se recuperan de su partida, que ocurrió minutos después de que protagonizara un severo siniestro el pasado martes por la tarde en la jurisdicción de Tandil, Buenos Aires, mientras conducía un camión de bebidas. El transportista viajaba junto a su esposa Paula Stork y su hija de 7 años, quienes permanecen hospitalizadas en la mencionada provincia a causa de las lesiones sufridas.

Para solventar los gastos médicos y poder acompañarlas durante el duelo, amigas y compañeras del equipo de básquet Tirica de Eldorado -en el que Paula juega- organizaron una venta de bonos de colaboración con sorteo de premios. Lo recaudado será destinado a los costos del tratamiento médico que ella y su pequeña actualmente reciben en Tandil, y a otros gastos corrientes que deberá afrontar la familia una vez de regreso a la tierra colorada.

El bono tiene un costo de 3.000 pesos y puede adquirirse a través del alias bianca.stork y el sorteo de los más de 12 premios se realizará el sábado 8 de febrero. Por otro lado, la comunidad de Tirica invita a aquellos que puedan colaborar con donaciones a la mencionada cuenta bancaria.

Tragedia en Buenos Aires

Tal como informó El Territorio, el episodio ocurrió pasadas las 13.45 del martes a pocos metros del cruce El Gallo sobre ruta 74, en la ciudad bonaerense de Tandil. De Olivera conducía un camión Iveco con carga de bebidas, y lo acompañaban Stork y su hija.

La familia viajaba de Misiones hacia la provincia de Buenos Aires cuando embistieron contra la parte izquierda de un automóvil Volkswagen Golf que intentaba ingresar a la carretera. Testigos relataron que el camionero advirtió a bocinazos al conductor del rodado menor que no ingresara a la ruta, ya que no había margen de maniobra para evitar el impacto.

El choque fue tal que el camión desbarrancó en sentido contrario y el conductor quedó atrapado en la cabina. A pesar de los intentos de equipos de Bomberos de Tandil que acudieron al lugar para asistir a la familia, De Olivera falleció pocos minutos después, mientras que sus compañeras fueron trasladadas a un hospital de la ciudad, donde permanecen bajo diagnóstico reservado.

Las ayudas no tardaron en llegar para la familia del camionero eldoradense, quien fue velado en la jornada de ayer en su ciudad de origen. En un primer momento, fueron sus amigos y allegados quienes organizaron una colecta para poder financiar el traslado de sus restos, que finalmente llegaron para recibir una última despedida este viernes.

Sobre los ocupantes del Golf, este medio supo que viajaban tres hombres de San Isidro, de los cuales dos fallecieron de camino al hospital. El tercero continúa internado, luego de sufrir traumatismo de cráneo.