Iguazú (LaVozDeCataratas) El hecho ocurrió alrededor de las 16 horas, cuando Isaias y varios menores del barrio San Miguel decidieron ir al arroyo a refrescarse. Al notar que su hijo no regresaba, su madre alertó a la policía, quienes comenzaron una búsqueda en la zona. Según relató la madre a los efectivos, luego de un rato, el niño desapareció en el agua, lo que llevó a la familia a iniciar la búsqueda por su cuenta antes de solicitar ayuda a los agentes de la Comisaría.
La policía, en conjunto con los bomberos voluntarios, realizaron un rastrillaje en el arroyo Bonito, pero fue al caer la noche cuando encontraron el cuerpo sin vida del menor. El médico policial determinó que la causa de su muerte fue asfixia por inmersión.
Tras la intervención del juez, se ordenó la entrega del cuerpo para su velatorio e inhumación. La comunidad de Wanda está consternada por la trágica pérdida de Isaias, quien era muy querido por su familia y amigos.
Este lamentable hecho resalta la importancia de la supervisión constante en las zonas de agua, especialmente en áreas no habilitadas para el baño. Desde las autoridades se insta a la precaución y a la protección de los niños en actividades recreativas cerca de cuerpos de agua.