Córdoba ha comenzado un proceso de transformación ambiental que incluye la creación del Parque de la Biodiversidad, un proyecto emblemático que busca preservar la flora y fauna del planeta en peligro de extinción, mientras se enfoca en la economía circular. Esta iniciativa surge en respuesta a los desafíos globales relacionados con la sostenibilidad, la reducción de residuos y la adaptación de las industrias a nuevas normativas ambientales.
En el bloque de Ambiente, Sociedad y Sustentabilidad de la abogada, Sonia Weisheim, el presidente del Ente Municipal Biocórdoba, Enzo Gabriel Cravero, explicó que la ciudad ha decidido transformar el antiguo zoológico en un parque dedicado a la conservación. “Desde 2020, trabajamos para dar un paso más allá en la protección del medio ambiente, un espacio que sea compatible con la conservación de especies y que sirva como ejemplo de sostenibilidad,” comentó. La idea central del parque es educar sobre la importancia de la biodiversidad y las amenazas que enfrentan muchas especies.
El parque, de 17 hectáreas, está diseñado para no exhibir animales enjaulados, lo cual es un concepto innovador. «Desde el principio, explicamos por qué no vera animales en jaulas, sino que el objetivo es sensibilizar sobre la conservación y resaltar el rol biológico de cada especie,» indicó Cravero. Este enfoque busca transmitir la importancia de preservar la biodiversidad y cómo su desaparición puede afectar a los ecosistemas. Además, el parque se centra en animales que están en proyectos de conservación en colaboración con varias ciudades del mundo.
La economía circular también juega un papel fundamental en este proyecto. Se busca cambiar la forma en que las industrias operan, para que produzcan bienes pensando en su ciclo de vida completo. Cravero destacó que el objetivo es reducir los residuos y mejorar la reutilización de materiales. “Las industrias deben adaptarse a un modelo donde la materia prima no provenga de recursos naturales finitos, sino de materiales reciclables o reutilizables,” comentó el presidente del ente. Esta perspectiva está alineada con la necesidad de reducir el impacto ambiental y generar menos basura.
El enfoque hacia la economía circular no es solo teórico. Cravero mencionó que algunas empresas transnacionales ya están implementando cambios en su producción para alinearse con las regulaciones internacionales, como el caso de Arcor. “Arcor ha comenzado a modificar su estructura industrial para cumplir con las regulaciones ambientales de la Unión Europea, lo que demuestra cómo la sostenibilidad se está convirtiendo en un factor clave para competir en mercados internacionales,” señaló.
Con estos cambios, Córdoba pretende no solo ser un referente en conservación y sostenibilidad, sino también preparar a sus industrias para un futuro en el que la adaptación a las normas ambientales será crucial. “Las empresas que no se adapten a este paradigma no podrán seguir comercializando a nivel global,” concluyó Cravero. El proyecto del Parque de la Biodiversidad, en su vínculo con la economía circular, marca un paso hacia la creación de una ciudad más amigable con el medio ambiente y alineada con las exigencias internacionales para un futuro más sostenible.