Romina Gaetani protagoniza Mamá, en el Multiteatro, una comedia que habla sobre los vínculos familiares. En el ping pong con VIVA, la actriz y cantautora reflexiona las veces que sufrió por amor, el poder para sanar personas y revela el deseo de ser madre.
-De no ser actriz, ¿qué te hubiera gustado ser?
-Me hubiera gustado estudiar psicología o psiquiatría. Y de adolescente quería seguir criminalística. Siempre me pareció interesante el trabajo de los investigadores en los crímenes. ¡Y eso que no me gusta la sangre!
-¿Sufriste por amor?
-Sí, la pasé muy mal, aprendí bocha y ese dolor dio buenos frutos para el presente. Son aprendizajes y con el tiempo y la sabiduría uno va entendiendo. Hoy estoy en pareja con Luis Cavanagh y estamos muy bien. Es empresario.
-¿Qué es lo que nunca falta en tu cocina?
-Palta, huevo, café y pan.
Romina Gaetani, hoy, a los 47. Foto: Mariana Nedelcu
Sufrí por amor, la pasé muy mal, pero aprendí bocha.
Romina GaetaniActriz y cantante
-Tenés veintipico de años de carrera. ¿Seguís sintiendo cosquillitas antes de los estrenos?
-Sí, lo especial está siempre, más cuando tenés el espíritu ávido de aprender. Yo nunca siento que me las sé todas.
-¿Qué te enoja?
-La desconfianza en cualquier tipo de relación. Que me revisen el celular, por ejemplo, me puede llegar a enojar mucho.
-¿Tenés una rutina antes de salir al escenario?
-Sí, vocalizo o medito, según lo que necesite. Primero veo cómo estoy de ánimo y de energía. Porque a veces me ayuda más quedarme chusmeando con una compañera que hacer otra cosa.
-¿Sufriste bullying de chica?
-Sí, y actualmente soy una mina con la autoestima baja. Al mismo tiempo, me digo: “Bueno tan baja no la debo tener si me subo en el escenario”. Pero al subir me olvido de la Romina que más de una vez no iba a la playa por vergüenza a que la vieran en bikini. Eso lo padecí mucho en mi adolescencia. También me pasaba de no reconocerme en una tapa de revista donde salía linda. Decía: “Esta no soy yo”. Había una distorsión de lo que yo creía de mí. Me ayudó mucho salir a la calle a pelear por nuestros derechos. Aprendí mucho del feminismo y de las nuevas generaciones. Soy una feminista con mucho por leer y aprender.
Romina Gaetani y el elenco completo de la obra Mamá. Foto: Soy Prensa.
-¿Una cuenta pendiente?
-Una era la música y la logré. Me costó más esfuerzo del que me hubiese gustado. Pero soy muy remadora con la música. También empecé a estudiar la carrera de dirección teatral y profesorado: otro pendiente en mi vida. Y ya pude dirigir un proyecto autogestivo. Feliz.
-¿Un mal hábito?
-El pucho, aunque sean dos por día.
-¿Primer bolo televisivo?
-A los 20 años con Inés Estévez en Verdad consecuencia. Mi texto era: “El dueño no está”. Me acuerdo de que estaba tan nerviosa que se veían las aureolas de transpiración en las axilas. Después hice otro bolo de tres meses, en Verano del 98, y al tiempo me metí en Chiquititas con Cris Morena. Y desde entonces no paré más durante veinte años, hasta que me metí en la música.
-¿Votaste a Milei?
-No. Le deseo lo mejor, pero no es alguien con quien pueda empatizar porque no puedo creer que una persona que represente a mi país hable con tanto odio. Desde ese lugar, ya me cuesta. Entonces, el no poder escucharlo me inhabilita a detectar qué está haciendo bien por mi país. Tengo muchos allegados que lo votaron y los respeto.
Me puse prótesis en las lolas y me arrepiento de haberlo hecho. Hoy no me identifican.
Romina GaetaniActriz y cantante
-¿Hacés terapia?
-Sí, soy re pro terapia. Amo hacerla desde que soy adolescente. Siempre tuve contención familiar, pero a la vez me gustó recibir la mirada de un profesional.
-¿Un miedo?
-A la violencia que se vive. Me genera miedo discutir o la confrontación con quien sea. Me vuelvo chiquita ante eso.
-¿Qué te gustaría cambiar de tu forma de ser?
-Me gustaría aprender a decir más “no” y a poner límites. Toda la vida me costó y me sigue pasando.
-¿Algún mantra o guía?
-Soy una mina muy espiritual. Tengo mil mantras que rezo alrededor de un rosario bendecido, pero ninguno específico. Soy católica, no practicante. Suelo meterme más de una vez en una Iglesia a escuchar misa si lo necesito. Hace dos años conocí a un cura que me re copó. De esos curas carismáticos. Suelo llamarlo por teléfono o voy a su misa y me río mucho con él. Hablo de todo y lo confronto. El me dice: “Esto es pecado”. Y yo le respondo: “Para mí, no. Explíquemelo”. Esto pasa cuando me confieso porque tengo ganas de comulgar.
Romina Gaetani empezó a estudiar dirección teatral. Foto: Mariana Nedelcu.
-¿Alguna cirugía estética?
–Me puse prótesis en las lolas y me arrepiento de haberlo hecho. Hoy no me identifican y creo que, como actriz, me terminaron limitando. Lo hice de muy jovencita por una inseguridad como mujer y para satisfacer la mirada ajena.
-¿En qué andas con la música?
-Ahora estoy grabando una canción con el productor Juan Blas Caballero, un productor que admiro muchísimo. Eligió el cover Piensa en mí. Lo estamos mezclando. La música me dio la oportunidad de un espacio de laboratorio. Nunca pretendo hacer un estribillo que pegue o un tema que esté de moda.
-¿Cómo te gustaría que te recordarán?
-Como alguien de buena madera.
-¿Algún talento oculto?
-Estudié siete años meditación con Saranya Zaveri, una maestra de la India, con la que aprendí lo que es poder sanar el cuerpo de otra persona, sanarse uno mismo y sanar también los ambientes. Tengo ese poder, pero no lo practico. Sí lo hago en casa o en las casas de las personas que amo. También estudié cinco años metafísica.
No sé si en esta vida voy a llegar a ser madre, quizás lo sea de la manera biológica, adoptando o de otro modo.
Romina GaetaniActriz y cantante
-¿La maternidad es algo que no elegiste o no se dio?
-La elegí y la sigo eligiendo. Yo congelé óvulos gracias al consejo de Florencia Raggi. Lo hice antes de la pandemia. No sé si en esta vida voy a llegar a ser madre, quizás lo sea de la manera biológica, adoptando o de otro modo. Luis, mi pareja, tiene hijos y me llena de emoción cuando me piden un consejo. Los amo con locura. Te confieso que he hecho tratamientos de fertilización estando soltera y no he quedado. Sé que tengo tiempo, me lo ha dicho mi médico, pero a la vez no me gusta esto de que te corre el reloj biológico. Hay muchas preguntas que me hago. Veremos. Dejo el corazón abierto y lo encomiendo al cielo. Pero que no sea un capricho más de Romina. Porque yo soy muy caprichosa.
-¿Miedo a la muerte?
-No, y tampoco le tengo miedo a la vejez. A mis 47, tengo mi celulitis, con la diferencia de que hoy sí voy a la playa.
Sobre la firma
Silvina Demare
Redactora de la sección Viva. [email protected]
Bio completa
Mirá también
Mirá también
Angela Leiva cuenta cómo salió de una relación tóxica: «Pude renacer»
Mirá también
Mirá también
Marcelo de Bellis revela sus talentos ocultos, de qué es «enfermo» y el futuro de Casados con hijos
Newsletter Clarín
Recibí en tu email todas las noticias, coberturas, historias y análisis de la mano de nuestros periodistas especializados
QUIERO RECIBIRLO
Tags relacionados