
Este martes, Axel Kicillof confirmó el desdoblamiento de las elecciones bonaerenses, que se celebrarán el próximo 7 de septiembre. La decisión fue tomada tras semanas de negociaciones infructuosas con los líderes del kirchnerismo, Cristina Kirchner y Máximo Kirchner, y busca evitar complicaciones logísticas derivadas de las elecciones nacionales y provinciales en la misma jornada.
Kicillof explicó que la medida responde a las dificultades que presentaría la implementación de dos sistemas de votación diferentes el mismo día, en referencia a la nueva Boleta Única de Papel (BUP) que propone Javier Milei. Según el gobernador, esta nueva modalidad causaría “un caos” si se combinara con la tradicional “sábana” de las elecciones bonaerenses.
En su discurso, Kicillof también adelantó que enviará un proyecto de ley a la legislatura provincial para suspender las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO). Esto implicaría que los votantes bonaerenses acudirían a las urnas en dos ocasiones durante el año.
En un intento por calmar las tensiones internas dentro del peronismo, el gobernador convocó a la unidad de su espacio político. “Voy a seguir trabajando por la unidad y vuelvo a convocarlos a un frente lo más amplio posible”, expresó, haciendo un llamado a todos los sectores que busquen defender los logros del gobierno provincial.
El anuncio se produce en medio de una creciente interna dentro del oficialismo, con figuras clave como Cristina Kirchner encabezando la lista de candidatos a diputada por la tercera sección electoral. Por su parte, Sergio Massa podría ser candidato en la primera sección. Sin embargo, la decisión de Kicillof marca una ruptura con el ala más dura del peronismo, lo que podría generar más tensiones en los próximos días, informó el portal TN.