
La inseguridad y la sensación de abandono se hacen sentir en el barrio Miguel Lanús de Posadas, particularmente en el sector C, donde los vecinos aseguran que no recibieron ninguna de las 1400 cámaras de seguridad que se adquirieron para reforzar la vigilancia en distintos puntos de la ciudad. Así lo expresó Néstor Benítez, referente vecinal que se mostró preocupado por la falta de respuestas.
“Se compraron 1400 cámaras de seguridad y acá no se colocó ninguna”, denunció Benítez, quien considera que el barrio está siendo postergado en materia de seguridad. Además, señaló que la problemática tiene raíces sociales profundas: “En general, como en todos lados, la problemática tiene diferentes facetas. La falta de trabajo y el cierto ahogamiento a la gente mayor, quien vive con la miseria que cobran los jubilados, obligadamente al que nunca pensó en delinquir, no le queda otro camino”.
Benítez también hizo un llamado a la conciencia colectiva y a la participación vecinal, apuntando que muchos vecinos no denuncian los hechos por desconfianza o desinterés: “Hay que motivar a los vecinos a que llamen al 911. Muchos piensan que hacer la denuncia es perder tiempo. Pero la única forma de combatir es participando”.
En ese sentido, criticó también la compra de objetos robados por parte de algunos vecinos: “Compran cosas de dudosa procedencia. Hay que sacarse eso de que ser buchón está mal. Hay que defender al laburante”.
El vecino insistió en que Miguel Lanús también merece ser tenido en cuenta: “También somos Posadas y pagamos impuestos. Queremos vivir tranquilos y seguros como cualquier otro barrio”.