Lucía Puenzo brindó una actualización del estado de su postergado proyecto, La Pistolera (La leyenda de Pepita), basado en la vida de la popular delincuente marplatense Margarita Di Tullio. En este caso, las noticias fueron buenas: en su cuenta oficial de Instagram la escritora y directora anunció que la filmación comienza la semana próxima.
“Después de un año de escritura y semanas de lecturas y ensayos, la semana que viene empezamos rodaje con este tremendo equipo y elenco. ¡Qué suerte tengo de tener este equipo! Hacer cine con ustedes es un refugio en la hecatombe social que vivimos. Gracias Lucas Jinkis y Buena Vista por la confianza. ¡Ahí vamos Mar del Plata! Viva el Cine Argentino”, escribió Puenzo, y arrobó a parte del elenco, compuesto por Luisana Lopilato, Charo López, Camila Peralta, Claudio Tolcachir Alberto Ajaka, Esteban Bigliardi, Gustavo Bassani, María Riot, Marcelo Subioto, Katrina Punk, Eliana Quilla y Lautaro Bettoni. La realizadora, además, compartió una serie de imágenes en las que puede verse a los actores caracterizados como sus personajes.
Esta semana, la protagonista del film, Lopilato, le había adelantado a LA NACIÓN que ya estaban ultimando detalles y que creía que la filmación comenzaría la semana próxima en Mar del Plata. “Me encantan los proyectos que involucran historias reales y tenía ganas de contar la historia de una mujer fuerte. No era normal ver una mujer en los ochenta rodeada de hombres y siendo la jefa. Y es un poco lo que se está viviendo hoy en día. Como que todo el tiempo estamos peleando otra vez. Ahora, a mí no me baja nadie, Margarita de Tullio se la banca. Entonces, quería contar esa historia y así empecé a juntar todas las piezas: qué se necesitaba para llevarla a cabo, quién tenía los derechos, cómo se podía hacer, si se podía lograr. Después, pensamos en Lucía. Para mí, esta película tenía que ser dirigida por una mujer”, indicó la actriz, que también cumple el rol de productora.
“Tuve la posibilidad de estar un poquitito más metida atrás, pero después están todos productores que sostienen con sus compañías. Yo apoyé más desde las charlas, desde querer empujar el proyecto, y aprendí un montón. Fue una manera de arrancar algo que quiero hacer en un futuro, que es producir e ir a buscar los proyectos que me gustan, ya sea para actuarlos o para que otros actúen. Esto me dio un empujoncito, siento que ahora empezó ese camino”, precisó, sobre su nuevo rol detrás de cámaras.
En septiembre de 2024 se dieron a conocer las primeras imágenes de Lopilato caracterizada como Di Tulio. En aquella ocasión, la actriz indicó: “Empezar a trabajar la caracterización del personaje es mi primera aproximación a Pepita. Me entusiasma mucho meterme en la piel de una mujer con tantos matices, es un desafío actoral muy grande para mí y tengo una gran ilusión por hacerlo junto con Lucía Puenzo, una directora a la que admiro mucho”.
En abril de ese año, la actriz le decía a LA NACIÓN: “Estoy muy contenta. Creo que es como un hijito para mí, porque hace muchos años que vengo atrás de este proyecto, de querer hacerlo, de poder producirlo. Pero alguien ya me había ganado de mano, Lucas Jinkis; él ya tenía los derechos para contar la historia de Pepita. Y bueno, me junté con él y le dije todas las ganas que tenía de hacer este proyecto, de llevarlo a cabo sea como fuera”.
Al final, pudo convencerlo. “Lucas me dejó la puerta abierta y me dijo: ‘Bueno, empecemos a buscar gente que quiera estar, que quiera poner plata e invertir en la película’. Me tocó tener las conversaciones, quizás un poco difíciles, para pedirle a gente que confía en mí que ponga dinero. Y así, de la nada, la película empezó a tomar forma. Era un sueño para mí porque me gustan los desafíos y me moría por trabajar con Lucía. Yo estaba convencida de que esta película tenía que ser dirigida por una mujer, sobre todo porque el poder que tenía la mujer en los 80 no es el mismo que tiene hoy, y Pepita fue una mujer muy respetada, muy imponente para la época”, le contó la actriz a este medio.
Y explicó: “A mí me gustan mucho las películas que están basadas en vidas reales; esas son las películas que miro y me gustan, me atraen. Siempre estoy buscando como actriz proyectos y cosas para hacer, te ofrecen libros, y un día, buscando, empecé a leer sobre ella y me pareció interesante. Es un gran desafío para mí y por supuesto que estoy ensayando mucho con Lucía y con mi coach, Sebastián Romero. Me pasa que hasta en los mismos ensayos necesito la máscara, porque yo no quiero que vayan a ver a Luisana Lopilato, quiero que vayan a ver a Pepita”.
La trama del film, escrita por Puenzo en colaboración con Andrés Gelós y Tatiana Mereñuk, recorre el derrotero de Margarita Di Tullio, la famosa criminal que revolucionó el negocio de la prostitución al rescatar y empoderar a mujeres víctimas de trata y se transformó en leyenda luego de un triple crimen en defensa de su familia.
Según se informa en la gacetilla, “en 1985, una madre de un recién nacido mata a tiros a tres delincuentes que irrumpen en su casa. El caso se vuelve hipermediático y ella es bautizada ‘Pepita, la Pistolera’. Pero no es la mujer inocente y vulnerable que todos creen.
¿Quién fue Pepita, la pistolera?
El nombre de Margarita Di Tullio saltó a los titulares en 1985, cuando mató a tiros a tres delincuentes que irrumpieron en su casa con un revólver calibre 38, supuestamente con fines de robo, aunque siempre se sospechó de que iban a cobrar una cuenta pendiente. El hecho fue tratado en un juicio por triple homicidio.
La Justicia consideró que la acusada actuó en legítima defensa y le concedió la libertad. El caso se volvió mediático y la autora del triple crimen fue bautizada como “Pepita, la pistolera”. Antes de convertirse en asesina, sin embargo, ya era una ladrona profesional y una maestra del engaño. También supo ser la madama más glamorosa de Mar del Plata en un mundo dominado por hombres y llegó a regentear durante décadas dos whiskerías en la zona del puerto marplatense.
Más tarde, su nombre volvió a aparecer en causas judiciales, primero cuando estuvo imputada de organizar el crimen del fotógrafo José Luis Cabezas y, años después, por pagar coimas a un juez para que liberara a cuatro hombres que estaban detenidos en la cárcel de Batán.
Di Tullio falleció a los 61 años en 2009 como consecuencia de una grave enfermedad en el Hospital Privado de la Comunidad de Mar del Plata, al que había sido derivada en un avión sanitario luego de sufrir un accidente cerebrovascular mientras estaba de vacaciones en la provincia de San Juan.