Hacer ejercicio de forma regular es clave para mantener la salud y fortalecer el cuerpo. Sin embargo, el descanso también cumple un rol fundamental: permite la recuperación de los músculos y previene lesiones por sobrecarga o fatiga.

Cuando la pausa se extiende por demasiado tiempo, comienzan a notarse las consecuencias, tanto a nivel físico como en la motivación para retomar la actividad. La pérdida de masa muscular, el descenso en el rendimiento y la falta de energía pueden aparecer con rapidez, especialmente si la persona tiene un estilo de vida sedentario, una condición de salud particular o una rutina irregular.

Qué pasa con tu cuerpo cuando dejás el gimnasio por un tiempo imagen-6 El ejercicio físico ayuda a mantener el cuerpo en movimiento.

Abandonar la práctica periódica de ejercicio físico no solo significa favorecer el riesgo de enfermedades cardiovasculares, patologías crónicas y los trastornos metabólicos, entre otros perjuicios derivados de la falta de movimiento, sino que conlleva cambios corporales que fueron estudiados.

Las consecuencias cuando dejamos de hacer ejercicio

Los beneficios de hacer deporte regularmente implican prevenir y controlar enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la presión arterial alta y los problemas cardíacos, pero si se deja esta actividad, «La fuerza muscular se conserva inicialmente, pero después de dos a cuatro semanas, notarás pérdidas en la fuerza y el tamaño muscular«, asegura el doctor Graeme Close, profesor de Nutrición deportiva y metabolismo deportivo en la Universidad John Moores de Liverpool.

Un estudio de Skidmore College descubrió que el metabolismo podría disminuir un 4% si descansás más de una semana. Esto puede provocar un aumento de casi un kilo en quince días, ya que realizar ejercicio físico de manera regular ayuda a quemar calorías, sintetizar grasas y azucares y a mantener un peso saludable.

Qué pasa con tu cuerpo cuando dejás el gimnasio por un tiempo imagen-8 Ejercitar fortalece los músculos.

Por otro lado, el ejercicio físico puede ser una forma importante demejorar el bienestar mental, debido a la liberación de endorfinas que genera, unos neurotransmisores que generan sensación de bienestar. Si se deja de hacer alguna actividad física, podemos experimentar un aumento del estrés, la ansiedad y la depresión.

La resistencia es otro de las aspectos que se van perdiendo en el lapso de dejar de ejercitar, según Bailonga fitness, un gimnasio online, al cuerpo le toma apenas de una a dos semanas perder resistencia, lo que aumentará la fatiga al momento de volver a entrenar y causará dolor en los días posteriores a los ejercicios musculares.

Qué pasa con tu cuerpo cuando dejás el gimnasio por un tiempo imagen-10 Dejar de hacer actividad física repercute en la resistencia.

En MedlinePlus, el sitio de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, señalan que cuando una persona tiene un estilo de vida inactivo puede sufrir algunas de las siguientes consecuencias:

Los huesos se debilitan y pierden algo de su contenido mineral.
Su sistema inmunitario quizás no funcione tan bien.
Puede tener una mala circulación de la sangre.
Su cuerpo puede tener más inflamación.
Puede desarrollar un desequilibrio hormonal.

Cómo evitar dejar de hacer ejercicio

“Nunca debemos dejar de practicar algún tipo de ejercicio”, afirma el doctor Mario Lloret Médico especialista en Medicina del deporte y autor de Ritme Training: readaptación inicial con técnicas motrices y ejercicios.

De acuerdo con el especialista, se debe aprovechar el movimiento diario para mantenerse en forma como caminar, bajar y subir escaleras, ir a comprar o dedicar unas horas a la jardinería durante entre 60 a 90 minutos al día.

Qué pasa con tu cuerpo cuando dejás el gimnasio por un tiempo imagen-12 Las formas de seguir haciendo ejercicio.

Las formas más adecuadas de prevenir los efectos negativos de dejar de hacer ejercicio es elegir hacer actividades menos exigentes como, por ejemplo, caminar, nadar o andar en bicicleta.