Solo menos de la mitad de los alumnos de tercer grado comprenden lo que leen. Así lo mostraron los datos de las pruebas Aprender Alfabetización 2024, que volvió a implementar la administración de Javier Milei en este nivel educativo.
De esta manera, apenas el 45% de los estudiantes alcanzaron el grado de alfabetización esperado al finalizar el primer ciclo de la escuela primaria. A nivel nacional, tres de cada 10 están “significativamente rezagados” de las habilidades esperadas y uno de cada 10 no sabe leer, alertó el Observatorio Argentinos por la Educación en su análisis de los resultados.
Los mejores desempeños se registraron en Formosa, donde un 63,6% alcanzó el grado de alfabetización esperado (nivel cuatro y cinco), seguidos por Córdoba (58,8%) y la ciudad de Buenos Aires (55,5%).
Al respecto, el gobierno porteño señaló: “La ciudad continúa destacándose en el panorama educativo nacional. En la evaluación Aprender Alfabetización 2024, muestra un desempeño superior al obtenido a nivel país, concentrando al 78,6% de sus estudiantes en los niveles 3 al 5 vs 69,6% a nivel nacional”.
En el otro extremo están Chaco (16,6%), Santa Fe (15,9%) y Misiones (15,2%), que registran el mayor porcentaje de estudiantes que no logran leer textos simples.
En el primer distrito un 3,7% son “lectores incipientes”, así definieron a quienes recién se inician en la lectura de oraciones y solo pueden leer palabras con apoyo de imagen, y un 12,8% se está iniciando en la lectura de textos simples (nivel uno). En el caso de Santa Fe y Misiones son aún mayores los lectores incipientes, que alcanzan el 4,1%. Mientras un 11,8% y un 11,1% de alumnos respectivamente quedaron en el nivel uno.
Neuquén fue la única jurisdicción cuyos datos están en observación por la baja participación de escuelas (40%) y de estudiantes (34%).
El caso Formosa
Formosa es la provincia que mostró mejores resultados. En el territorio que desde 1995 gobierna Gildo Insfrán (PJ), el 63,6% de los alumnos comprenden lo que leen, mientras que a nivel nacional apenas el 45% de los estudiantes terminaron con las habilidades lectoras esperadas el primer ciclo de la escuela primaria.
En esa provincia, un 26,6% comprendió textos complejos de forma literal, inferencial y reflexiva y un 37% logró, además, realizar inferencias complejas (nivel V).
A su vez, registró bajos niveles en los peores indicadores. Los “lectores incipientes” alcanzan el 2,8% y quienes se están iniciando en la lectura de textos simples (nivel uno) llegan al 4,9 por ciento.
“Es una provincia con muy bajos recursos. ¿Qué puede haber pasado? Requiere una investigación. ¿Qué metodología están utilizando?”, se preguntó la especialista e investigadora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), Guillermina Tiramoti.
“Va en contra de los datos generales que muestran que hay una relación entre desempeño y nivel económico. Te hace sospechar qué han hecho en Formosa”, afirmó Ana María Borzone, especialista en alfabetización inicial.
A nivel nacional, los resultados evidenciaron las brechas persistentes por nivel socioeconómico y, tipo de gestión. Entre los segmentos de menores recursos, el 44% de los estudiantes están rezagado, tres veces más que en los sectores más favorecidos (12,6%). Solo el 39% de los alumnos de escuelas estatales alcanzan el nivel lector esperado, frente al 62,4% en los establecimientos privados. Uno de cada tres alumnos de instituciones públicas se encuentran rezagados (no alcanzan el nivel tres), mientras que en el sector privado esa proporción es la mitad.
Borzone se permitió dudar de la fiabilidad de los datos. “Una expresión que preocupa, dicen que hay chicos que solo saben leer si tienen la imagen al lado. Eso no es leer. También me permito dudar de los resultados, por la garantía de que no haya falsedad por parte de las provincias. Otros años hubo casos en los que los docentes les anticipaban los resultados a los chicos y, en esta ocasión, no nos consta la transparencia y verificación del proceso de evaluación”, planteó. Enfatizó en la importancia de que estas pruebas estén diseñadas por expertos y que se apliquen en forma independiente.
“Santiago del Estero también tiene muy buenos resultados. En ambos casos es muy sospechoso, ya que no se condice con sus antecedentes en evaluaciones previas (como Aprender 2018)”, afirmó en esa misma línea el afirmó Roy Hora, doctor en Historia Moderna por la Universidad de Oxford, profesor titular en la Universidad Nacional de Quilmes e investigador principal del Conicet, ante la consulta de LA NACIÓN.
“Nuestro país ya registra varios casos de manipulación de datos públicos: Indec 2007-2015 [con el exsecretario de Comercio Guillermo Moreno, a quien recientemente le confirmaron su condena]. Y también las anomalías en el censo 2010 en La Matanza. Las pruebas Aprender proveen información valiosa para detectar problemas y volver más eficaz la política educativa. No hay mejora posible sin evaluación. Es lamentable que quienes se llenan la boca hablando del ‘Estado presente’ aparezcan sospechados de manipular resultados. Para fortalecer la cultura de la evaluación, es imprescindible forjar un mejor sistema educativo, estas anomalías deben ser explicadas. Ojalá suceda pronto. Y si hay delitos y responsables, que no pasen 20 años hasta que sean sancionados», concluyó.
No es posible todavía analizar el por qué de la posición que ocupa Formosa en las habilidades lectoras. No están disponibles aún los datos desagregados, según fuentes de la Secretaría de Educación de la Nación, a cargo del operativo Aprender. El informe final estará disponible a fin de mes.
Metodología
“Estamos muy tranquilos con la muestra que tenemos. Es una muestra que duplica la de 2016 con altos grados de participación, exceptuando el caso de Neuquén que aclaramos. Se hicieron capacitaciones a equipos técnicos jurisdiccionales y a docentes aplicadores. Y también en todas las provincias hay veedores nacionales”, afirmó ayer María Cortelezzi, subsecretaria de Información y Evaluación Educativa de la Secretaría de Educación de la Nación durante el Congreso Nacional de Alfabetización para Supervisores, donde se presentaron los resultados de las evaluaciones.
La funcionaria también detalló que el procedimiento estandarizado para que las pruebas salgan bien también implica ocho modelos distintos de evaluaciones, está definido como deben distribuirse, y con docentes aplicadores de nuevo que son externos a las escuelas.
“En un primer vistazo puede llamar la atención, pero como antecedentes para leer el resultado de Formosa viene desempeñándose en cada edición mejor. Nosotros al día de hoy la información que tenemos y lo que tenemos analizado es lo que presentamos en este informe preliminar”, planteó.
A su vez agregó que están trabajando en el informe final para aportar más análisis. “Tenemos cuestionarios complementarios con más información para explotar y para poder conocer cómo el contexto puede estar incidiendo, como las prácticas de los docentes. Va a ser bueno ponerla en relación con los resultados de la provincia para entender mejor esos desempeños”, agregó.
Por su parte, la pedagoga y presidenta de la asociación civil Educación para Todos, Irene Kit, aportó: “La metodología de la toma y la evaluación es igual en todo el país: hay controles externos, hay veedores. Formosa desde hace por lo menos 15 años fue desarrollando una metodología de enseñanza, de lectura y escritura, basada en el enfoque equilibrado de la enseñanza de la lengua, con mucha formación docente, acompañamiento a las escuelas, sencillo, pero sostenido”.
Con la colaboración de Evangelina Himitian