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El barrio San Isidro, en la ciudad de Posadas, se ha transformado en una “pista de competición” para grupos de motociclistas que realizan picadas ilegales con motos modificadas y escapes libres, generando un nivel de ruido que afecta gravemente la calidad de vida de los vecinos. Así lo denunció Mario Vera, residente del lugar, quien asegura que la situación se repite todos los días, a toda hora.
“Estamos pasando un momento grave. Se juntaron varias motos y agarran a San Isidro como si fuera un circuito. Es un ruido infernal. De lunes a lunes, a la madrugada, a la siesta y a la noche. No se puede vivir”, expresó Vera en diálogo con MisionesCuatro.
El vecino, que además padece problemas de salud, se mostró visiblemente afectado por la falta de respuesta de las autoridades. “Estoy enfermo y no puedo movilizarme hasta la municipalidad. Esta debe ser la tercera nota que damos sobre este tema. Nadie hace nada”, lamentó.
Entre los testimonios más alarmantes, Vera mencionó que “algunos vecinos compraron armas” como una reacción desesperada ante la falta de controles. Además, describió cómo las motos cruzan el barrio “a más de 100 kilómetros por hora”, poniendo en riesgo a peatones, niños y familias enteras.
“Es un barrio, no una pista de competición”, enfatizó, y pidió urgentes controles policiales y municipales para frenar esta práctica que no solo infringe las normas de tránsito, sino que representa una amenaza directa para la seguridad y el descanso de los vecinos.