Tardanzas, goteras y máquinas sin batería: las dificultades para votar en una escuela del sur porteño

«Todo lo que puede salir mal, saldrá mal», dice un principio popular conocido como «Ley de Murphy» y que este domingo pareció haberse cumplido a rajatabla en la Escuela Técnica 13 “Ing. José Luis Delpini”, de Villa Lugano, donde las mesas abrieron tarde, se cortó la luz, hubo goteras y las máquinas para votar se quedaron sin batería.

Como en cada elección, local o nacional, las mesas abren a las 8 y emprenden así la maratónica jornada hasta el cierre y el recuento de votos. Sin embargo, en el sur porteño, no fue hasta cerca de las 10 que los que decidieron ir temprano a sufragar recién pudieron hacerlo.

No fue tardanza de las autoridades de mesa, sino del Correo, que llegó tarde, y a dos máquinas que presentaron problemas técnicos y debieron someterse a un cambio de baterías.

Así, las filas se fueron alargando más y más y la paciencia de los vecinos, con DNI en mano, se fue contrayendo.

Tanto en ese barrio, como en otras zonas del sur de la ciudad, por ejemplo Parque Patricios varios vecinos se quejaban por un persistente corte de luz que lleva al menos dos días.

Mientras tanto, fallas estructurales edilicias se vieron permeables a los vestigios de las tormentas que azotaron a la Capital este fin de semana y las goteras dijeron presente.

Pasillos más bien angostos, por donde cotidianamente transitan alumnos y docentes, este domingo se llenó de votantes que debieron lidiar con dificultades presentadas por el entorno y, en algunos casos, para elegir a qué candidato darle un voto de confianza para la Legislatura porteña.

Además, la novedad de la Boleta Única Electrónica también fue protagonista generadora de confusiones. En este caso, simplemente por su carácter novedoso y las dudas que eso genera ante personas más y menos «duchas» para afrontarlas en una situación como la de este domingo.