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Se dice por la Costa Azul de Francia que hay una especie de maldición con el Festival de Cannes, por lo cual cuando llega el lapso en el que el evento más importante del cine europeo se realiza, siempre llueve. Lo raro es que en esta región del sur francés, en esta época, no suele caer agua. Pero llovió este martes…
Aunque, como dice el dicho, siempre que llovió… No solo que paró, sino que se abrió el cielo y dejó pasar a los rayos solares de una manera que parecía verano. De hecho, en Cannes había gente en la playa (aprovechando que hay arena, no piedra como en Niza, otra ciudad de esta zona) y paseando por el puerto para ver los yates o ya barcos por lo grande de su tamaño y lujo. Gracias a que el día se había compuesto y que es toda una estrella, Franco Colapinto no solo fue hasta donde se celebra el festival, sino que pasó por la famosa alfombra roja -donde estuvieron hoy Jodie Foster, Scarlett Johansson y James Franco, por ejemplo-, a la que apuntan cientos de fotógrafos (vestidos con riguroso esmoquin) de ambos lados, y enfrente colegas subidos a escaleras, con gente detrás cogoteando desde la vereda de enfrente.
Colapinto posa delante del auto Alpine.
¿Cómo lo sabemos? Olé estuvo allí.
Qué fue a hacer Franco Colapinto al Festival de Cannes
No nos imaginamos al piloto yendo al Palacio de Festivales y Congresos de Cannes a sentarse en alguno de los dos pisos de la fantástica sala (su figura de estrella da para que vaya a la de abajo) a ver una película. Sobre todo por el tiempo que quizá no tiene, ya que se le avecina su segunda carrera desde que lo anunciaron como piloto de Alpine, con inicio el viernes en Mónaco, octava fecha de la temporada.
Colapinto y Gasly se divirtieron en Cannes.
Franco y su compañero Pierre Gasly fueron a promocionar un auto de calle de Alpine, en una acción de marketing muy importante para la marca. Los dos pilotos posaron frente a uno de los glamorosos hoteles que se levantan frente al mar turquesa y luego llegaron al Palacio para disfrutar el ambiente y que les tomaran unas fotos en la famosa alfombra roja.
Un dato: Colapinto vestía un esmoquin que consiguió en Mónaco y Gasly, uno de Givenchy, marca que representa.
Gasly y Colapinto en Cannes.
Luego regresaron al hotel de esta ciudad donde se alojan hasta este miércoles, día en el que viajarán a Mónaco (53 kilómetros en auto, nada grave), donde se tomarán una jornada de descanso de la F1. Ya el jueves estarán en el circuito callejero para cumplir con las primeras acciones de prensa, marketing y con el equipo de cara a la competencia.
La mitad de la escudería viajó directamente de Imola a Enstone, donde tiene una de las sedes, mientras que Colapinto y la gente involucrada en la parte carrera apuntó la proa hacia la Costa Azul.
El viernes ya el argentino se subirá al Alpine #43 para realizar los dos ensayos del día, con un tercero el sábado antes de la clasificación. El domingo es la carrera.
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