Pedro Sánchez vive sus horas más críticas como presidente del gobierno de España. Lleva siete años en el poder y los indicios de corrupción que un informe de la Guardia Civil revela sobre quienes fueron dos altos cargos del Partido Socialista -que Sánchez lidera- lo están dejando al borde del precipicio.
Porque la investigación de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil señala al ex ministro de Transporte, José Luis Abalos, y al ahora ex secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán -quien, a su vez, había sucedido a Abalos en el cargo-, como protagonistas de una trama que cobraba coimas para adjudicar obras públicas en distintas ciudades españolas.
Pedro Sánchez, en la Cámara de Diputados, hace frente a las agresiones de la oposición. Foto: Cézaro De Luca
Desde hace casi una semana, la filtración de audios y documentación que figuran en el inform de 490 páginas aportan, día tras días, detalles cada vez más escabrosos sobre el comportamiento de Abalos y de Cerdán, colaboradores muy cercanos a Sánchez. Junto a ellos, en 2016, el actual presidente de España recorrió el país en su Peugeot 407 para volver a tejer la red de apoyos que lo devolverían a la secretaría general del PSOE.
Desde la sede del partido, Sánchez se mostró compungido, demacrado -aunque la oposición alega que era un efecto intencional de maquillaje- y pidió unas disculpas que no conforman al resto de partidos políticos. Ni siquiera a quienes integran el gobierno de coalición que él lidera.
Sumar, su socio minoritario, pide revisar los fueros que protegen a los políticos y sancionar a las empresas que hayan pagado coimas.
“Las explicaciones (de Sánchez) son insuficientes”, dijo el martes por la noche en la televisión pública española Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda, ministra de Trabajo y líder de Sumar.
“No es verdad que la corrupción es inevitable”, agregó, y marcó el límite de su partido para permanecer en el gobierno o salir de la coalición: “Que esto (la corrupción) se extienda al Partido Socialista -dijo la vicepresidenta-. Supondría que existe un mecanismo (de financiamiento) irregular en una manifestación política. Y esto de una gravedad manifiesta”.
La línea roja que trazó la ministra de Trabajo se refiere a la honestidad brutal de las palabras de la vocera del gobierno, Pilar Alegría, quien el martes, durante la conferencia de prensa posterior a la reunión de gabinete semanal, confesó en relación a quienes aparecen involucrados en el informe de la Guardia Civil: “Si van a aparecer más nombres, no lo sé”.
Sumar está formado por una 15 fuerzas de izquierda, algunas de las cuales agitan la bandera de abandonar el gobierno de coalición.
Sólo arropado por los ministros socialistas
En muestra de disconformidad con lo que, según el partido de Yolanda Díaz, fue una magra explicación por parte del presidente del gobierno a los indicios de corrupción en el PSOE, ni la vicepresidenta ni el resto de ministros de su partido asistieron este miércoles a la sesión de control al gobierno en el Congreso. Sólo estuvieron presentes los ministros de Sumar que debían responder preguntas, ya agendadas, de los distintos grupos parlamentarios.
Sánchez llegó al Congreso este miércoles más temprano que de costumbre: a las 8.15 ya estaba en el Parlamento. La sesión de control comenzaba a las 9.
Varias bancas vacías entre los ministros de Sánchez. Los que pertenecen a Sumar no asistieron en protesta Foto: Cézaro De Luca
En la puerta del Congreso, sobre la Carrera de San Jerónimo, circulaban vehículos con carteles en los que, junto a fotos de Sánchez, se podía leer: «Corrupto”.
Un colectivo y camiones de reparto giraron frente al Congreso de España protestando contra el presidente de gobierno Pedro Sánchez. Foto: Cézaro De Luca
Es la tercera vez que el presidente del gobierno se deja ver en menos de una semana. El 9 de julio se presentará de nuevo en el Congreso para lo que los españoles llaman un “pleno monográfico”, es decir, una entera sesión parlamentaria dedicada a exponer y responder preguntas sobre los indicios de corrupción que están hundiendo a su partido y asfixiando a su gobierno.
Sánchez se atrinchera en un “no” al adelanto electoral
“El único adelanto que va a haber no es el de las elecciones. Es el de más que lógica sentencia, a la vuelta del verano, de muchos casos que afectan al Partido Popular”, dijo el presidente en el hemiciclo, disipando especulaciones sobre una convocatoria de comicios anticipada.
“La corrupción cero no existe. A diferencia de ustedes, nosotros la expulsamos”, respondió a las críticas del Partido Popular.
Sánchez este miércoles en el Congreso, donde asistió a la sesión de control al gobierno. Foto: Cézaro De Luca
“Este es un caso de corrupción que ha sido doloroso para el PSOE pero hemos actuado -insistió-. Esto no va a opacar el extraordinario momento económico y social que atraviesa nuestro país.”
Moción de censura
“No me falta ganas. Me faltan cuatro votos”, le dijo el presidente del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, respecto de los apoyos parlamentarios que necesitaría para que una moción de censura contra Pedro Sánchez prosperara.
El líder de la oposición Alberto Núñez Feijóo (der), avisa a Pedro Sánchez que sólo le faltan cuatro votos para una moción de censura en su contra. Foto: Cézaro De Luca
“Abalos fue el principio pero Cerdán no será el final”, sentenció el líder del PP.
“Usted es el lobo que ha liderado una manada corrupta todos estos años”, dijo Núñez Feijóo.
“Ahora sus socios tienen que elegir si quieren seguir en la trama de corrupción”, agregó en alusión a las fuerzas políticas que apoyaron la reelección de Sánchez en 2023.
La bancada del PP comenzó a pedir la renuncia del presidente. Coreaban: “¡Dimisión, dimisión!”.
Núñez Feijóo, del PP, salió del Congreso y se acercó a una protesta de alcaldes de toda España en las afueras del Parlamento. Foto: Cézaro De Luca
“¿Cuánto dinero de los españoles se ha ido por las tramas de corrupción que lo rodea?”, fue la pregunta retórica a Sánchez de Santiago Abascal, el líder de Vox.
“Mientras su entorno robaba, los españoles están haciendo la declaración de la renta (impuestos) -agregó-. Es usted un indecente. Un corrupto y un traidor.” Y abandonó el hemiciclo sin escuchar la réplica del jefe del gobierno.
Reunión con los partidos que lo apoyaron
“Políticamente la Legislatura ya está muerta”, dijo al salir de la sesión Ione Belarra, secretaria general de Podemos.
El partido que fundó Pablo Iglesias y que gobernó con el PSOE entre 2020 y 2023 no acudirá a la ronda de consultas que Sánchez está haciendo con los siete partidos -además del suyo- que apoyaron su reelección hace casi dos años.
Tampoco quiere reunirse con el presidente el Bloque Nacionalista Gallego (BNG).
El independentismo catalán sí, pero aprieta con condiciones para no soltarle la mano.
Junts per Catalunya, el partido del ex presidente Carles Puigdemont, exige que Pedro Sánchez cumpla lo que prometió: la ley de amnistía todavía no se aplica como los catalanes esperaban y el gobierno de España aún no pudo introducir el uso del catalán como lengua co-oficial en la Unión Europa.
Esquerra Republicana, la fuerza independentista más moderada, pide sanciones para las empresas que pagaron las coimas y el fin de los fueros para proteger a los corruptos.
“Ustedes actúan contra la corrupción cuando la UCO la detecta”, le recriminó a Sánchez Gabriel Rufián, vocero de Esquerra en el Congreso.
A los socios que avalaron la última reelección de Pedro Sánchez no les conviene un adelanto electoral. La duda que los carcome es saber si Sánchez estaba al tanto o no de las maniobras ilícitas de sus ex colaboradores. Pero aún les queda por “cobrar” algunas concesiones que el socialista les hizo a cambio de su apoyo en 2023. Y un posible futuro triunfo electoral de la derecha, les cerraría la puerta a toda esperanza.
“No hay salida digna”
Dentro del mismo PSOE hay voces que no ven escapatoria para el gobierno de Pedro Sánchez.
El presidente regional de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page lo definió este miércoles como “el momento más grave de credibilidad en el Partido Socialista en toda su historia reciente”.
“Sánchez nos está metiendo en un laberinto sin salida -opinó el socialista-. Lo dramático es que no hay salida digna.”
Sánchez defiende en el Parlamento la actuación del PSOE ante los casos de corrupción. Foto: Cézaro De Luca
Durante el fin de semana, un alcalde gallego del PSOE pidió un adelanto electoral. “Antes de que acabe el 2025 hay que celebrar elecciones generales” -expresó en sus redes Blas García, alcalde de Ames, un municipio de la provincia de La Coruña de unos 33 mil habitantes-. Debe poner fin a este barullo y a la situación política irrespirable.”
Sobre la firma
Marina Artusa
Corresponsal en España [email protected]
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