Hay, por lo menos, dos percepciones opuestas respecto de las ciclovías y bicisendas porteñas: la del gobierno de la ciudad, que engloba posibles levantamientos junto con mejoras de ciertas trazas, y la de los usuarios, que entre otras cuestiones piden la extensión de la red, que hoy tiene 310 kilómetros concentrados, en su mayoría, en el noreste y el centro de la Capital, en detrimento sobre todo de la zona oeste.
Lo cierto es que la Ciudad continúa avanzando en los sectores que considera esenciales para este tipo de movilidad. La selección de aquellas bicisendas y ciclovías a mejorar o remover se basa en un estudio de la red y su uso. Así decidieron a fines de 2024, por ejemplo, quitar el tramo de la calle Tucumán, acción que fue frenada luego de que los ciclistas presentaran una medida cautelar, o el ensanchamiento de la que tendida sobre Billinghurst. A este último caso se sumaron las emplazadas en Valle y Estados Unidos.
Ahora, el Ministerio de Movilidad Urbana (ex-Infraestructura) anunció que, entre las mejoras que se proyectan, ya comenzaron a intervenir la traza de Gorriti con la misma intención de ensanchar los carriles. Se trata de un recorrido por el barrio de Palermo de poco más de tres kilómetros, entre Serrano y Mario Bravo, que, afirmaron a través de un comunicado oficial, sería uno de los más utilizados de la red.
Ya a principios de 2024, cuando apenas comenzaba la nueva gestión, se abocaron a analizar el sistema de ciclovías y bicisendas sobre la base de dos ejes: entorpecimiento del espacio y caudal de usuarios. Esto iba a determinar cuáles mantener y cuáles quitar, aunque sin estudiar todavía una posible extensión. Ese análisis se realiza a partir de las cámaras de monitoreo y la inteligencia artificial, dos herramientas con las que buscan establecer el flujo de ciclistas de cada sector.
Pablo Bereciartua, ministro de Movilidad Urbana, sostuvo: “Los datos son fundamentales para implementar soluciones exitosas en movilidad. Analizamos los flujos de cada ciclovía y detectamos oportunidades de mejora en algunas de las más utilizadas y con mayor capacidad de crecimiento de usuarios, dada la centralidad que ocupan y la transversalidad en la red”.
La ciclovía de Gorriti es utilizada por más de 2000 ciclistas al día, según la información que compartió la cartera porteña. Como abarca una área de alto tránsito vehicular, el comunicado remarca que los trabajos se centran en “la repavimentación de cunetas y mejoras de señalización de la ciclovía existente para mejorar la experiencia de los ciclistas que utilizan este corredor clave, que atraviesa zonas de alta densidad urbana y conecta con centros de trasbordo y zonas de alto flujo peatonal y vehicular”.
Como se contó, en esta ocasión se trata de ampliar los carriles, pero como parte de un proyecto más amplio que planea también incorporar señalética, rediseñar intersecciones y mejorar el pavimento. Algunos de estos problemas fueron denunciados por varios usuarios en otra nota de LA NACION, como el desgaste de la pintura verde en las esquinas, que funciona como una señal de atención, o los baches en el pavimento, además del desnivel en la calzada y otros.
Esta decisión de mejorar determinados sectores de la red forman parte del Plan de Ordenamiento del Tránsito, que, según sostiene el gobierno porteño, “busca integrar la bicicleta al sistema de transporte público, fomentando la intermodalidad como estrategia para disminuir la congestión y promover hábitos de movilidad sustentables”.
La nueva intervención se realiza después de que se terminara el ensanche del 25% en más de 1,3 kilómetros en la ciclovía de Billinghurst, que va de Perón a Gorriti, y de la puesta en valor de las ubicadas en Valle, entre Doblas y avenida La Plata, un tramo de dos cuadras, y en Estados Unidos, desde la avenida La Plata hasta Virrey Liniers, es decir, diez cuadras.
Entre otras obras, también repavimentaron seis cuadras en el entorno del Hospital Británico, poniendo el foco en el acceso a la institución tanto de médicos como de pacientes y familiares; adecuaron el trazado de Amenábar y agregaron 800 metros a la de García del Río.