El Papa advierte que en tiempos de «terribles conflictos» no hay lugar para las divisiones y los odios

El Papa León XIV alineó estrictamente a sacerdotes y obispos católicos indicando que “en un tiempo de grandes y terribles conflictos no hay lugar para divisiones ni odios de ningún tipo” en la homilía de la misa que celebró este viernes en celebración del Jubileo de los sacerdotes en el Auditorio de la Conciliación.

El jueves había reunido a 400 obispos de 38 países y les dijo que “deben ser firmes y respetar las normas en caso de abusos sexuales”, especialmente de abusos contra menores, “ateniéndose a las disposiciones vigentes”.

A los sacerdotes católicos que llenaban el Auditorio y son medio millón en todo el mundo, reiteró dijo que deben mantenerse “reconciliados, unidos, trasformados por el amor que brota abundantemente del Corazón de Cristo”.

El Papa León XIV recibió a en el Vaticano a obispos de todo el mundo. Foto: REUTERS

“Caminemos juntos tras sus huellas, humildes y decididos, firmes en la fe y abiertos a todos en la caridad, llevemos al mundo la paz del Resucitado, con esa libertad que nace que nace de sabernos amados, elegidos y enviados por el Padre”, les dijo.

León XIV llevó a cabo también la ordenación de nueve sacerdotes procedentes de 23 países.

A ellos el pontífice les aconsejó que “sean generosos, fervorosos en la celebración de los sacramentos, en la oración y donen su tiempo y energías a todos, sin escatimarse, sin hacer diferencias”.

“Nuestro mundo propone muchas veces modelos de éxito y prestigio discutibles e inconsistentes”, advirtió, pidiendoles que “no se dejen embaucar por ellos.

El Papa concluyó así: “Miren más bien el sólido ejemplo y los frutos del apostolado, muchas veces escondido y humilde, de quién en la vida ha servido al Señor y a los hermanos con fe y dedicación, y mantengan su memoria con fidelidad”.

El Papa León XIV, durante una misa este viernes en la basílica de San Pedro. Foto: REUTERS

«Estilo sencillo y sobrio»

Además invitó a los obispos “a tener un estilo sencillo sobrio, generoso, digno y al mismo tiempo adecuado a las condiciones de la mayoría de su pueblo”.

“Cuando las familias llevan cargas excesivas y las instituciones públicas no las sostienen claramente, cuando los jóvenes estan decepcionados y hartos de mensajes falsos, cuando los ancianos y las personas con discapacidades graves se sienten abandonados, el obispo está cerca y no ofrece recetas sino la experiencia de comunidades que tratan de vivir el Evangelio con sencillez y compartiendo con generosidad”, señaló.

Antes de acudir al Auditorio romano, León XIV fue a saludar a los miembros del Consejo Ordinario de la secretaría general del Sínodo de los Obispos para animarlos en su trabajo.

El Papa también ha sido invitado a visitar la más grande de las cuatro salas de los Museos Vaticanos dedicadas a Rafael, tras un trabajo de diez años para limpiar las pinturas, que ha permitido hacer descubrimientos que reescriben la historia del arte.

Los trabajos perrmitieron descubrir una novedosa técnica empleada por el renombrado pintor y arquitecto del Renacimiento en la llamada Sala de Constantino. La sala de recepción fue pintada por Rafael y sus estudiantes a partir del primer cuarto del siglo XVI y esta dedicada al emperador romano Constantino, del siglo IV, cuya conversión al cristianismo ayudó a difundir la fe por todo el imperio Romano.

“Con esta restauración reescribimos una parte de la historia del arte”, afirmó la directora de los Museos Vaticanos, Barbara Jatta.