
La historia de Víctor Díaz, un joven peón rural paraguayo, conmovió a miles en redes sociales. Tras 11 años de trabajo en una estancia, fue despedido y debió alejarse no solo de su empleo, sino también de su perro, el compañero que lo acompañó día tras día.
“Mi buen amigo… lo voy a extrañar un montón”, se escucha decir entre lágrimas mientras camina por el campo. A su lado, el perro lo sigue, paso a paso, como entendiendo que se trataba de una despedida. “Dije que no iba a llorar, pero veo a este perro y lloro”, confiesa.
Víctor compartió el momento en su cuenta de Instagram, donde tiene más de 437.000 seguidores. El video se volvió viral rápidamente. En él, se ve la tristeza del joven y la lealtad silenciosa del animal, que camina con él hasta el final.
La reacción en redes no tardó en llegar. Miles de usuarios le dejaron mensajes de apoyo y destacaron el vínculo inquebrantable con su perro. Muchos lo alentaron a seguir adelante y le agradecieron por mostrar un lado tan humano y sincero.
“Cuiden su laburo”, pidió a sus seguidores en un mensaje final cargado de emoción, pero también de esperanza. “Tranqui, ya vamos a encontrar algo mejor”, agregó, tratando de consolarse.
Más allá del dolor, Víctor dejó una lección sobre el valor de la fidelidad, el afecto auténtico y la dignidad ante la adversidad.