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La Jefatura de la Policía de Misiones comenzó este miércoles con el proceso de evaluación semestral del desempeño de las unidades operativas, una herramienta clave para medir resultados, ajustar estrategias y proyectar mejoras en la seguridad pública.
En esta primera etapa, el foco está puesto en las comisarías y divisiones de las Unidades Regionales I y X, con asiento en la ciudad de Posadas, que integran la denominada zona Capital. La evaluación alcanza a los jefes de dependencias, quienes deben rendir cuentas sobre los objetivos trazados al inicio de su gestión y el cumplimiento de los mismos durante el primer semestre del año.
La reunión fue encabezada por el Jefe de Policía, Comisario General Dr. Sandro Alberto Martínez, junto al Subjefe, Comisario General Lic. Marcos David Lopez Asencio, y el Director General de Seguridad, Comisario General Raúl David Malowski. También participaron los titulares de comisarías y áreas operativas convocadas.
A lo largo del encuentro, los jefes policiales presentaron informes detallados donde se analizaron indicadores de gestión, acciones de prevención del delito, operativos implementados y el vínculo con la comunidad. Además, se identificaron fortalezas, falencias y oportunidades de mejora, en un espacio de intercambio técnico con la conducción superior.
Este procedimiento forma parte de una política institucional orientada a elevar los estándares de eficiencia operativa, fortalecer la conducción en todos los niveles jerárquicos y garantizar que los recursos disponibles se utilicen con impacto real en el territorio.
Pero la evaluación no se limita a Posadas. En las próximas semanas se replicará en las 13 Unidades Regionales del interior de la provincia, abarcando la totalidad de las dependencias policiales con asiento en los 79 municipios de Misiones. Así, la Jefatura busca consolidar un sistema de control interno continuo, transparente y con foco en resultados.
Finalmente, los datos recabados en esta etapa serán claves para revisar, ajustar o reformular el Plan Anual de Seguridad, de acuerdo a las dinámicas del delito, las demandas de la ciudadanía y la necesidad de sostener una seguridad pública cercana, profesional y efectiva.
