Un grupo de 43 diputados de Unión por la Patria (UP) presentó este martes un pedido formal para remover al libertario José Luis Espert de la presidencia de la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados. La iniciativa se apoya en el artículo 107 del reglamento de la Cámara y argumenta que el economista ha incumplido con las funciones inherentes al cargo al no convocar reuniones ordinarias ni extraordinarias desde su designación.
“El Parlamento no puede seguir funcionando sin reactivar el corazón del proceso legislativo en materia presupuestaria”, advierten los firmantes, que acusan al economista liberal de haber vaciado de contenido a una de las comisiones más relevantes del Congreso.
“Esta conducta -por omisión- erosiona la función deliberativa del Congreso, compromete la división de poderes y constituye una falta de respeto a la ciudadanía, que legítimamente demanda transparencia, control y planificación pública”, señala el proyecto.
Según la iniciativa, la parálisis de la comisión afecta de manera directa el funcionamiento institucional del Congreso, impide el tratamiento de leyes clave y consolida un esquema de administración financiera “opaco, discrecional y carente de legitimidad”.
Entre los proyectos demorados, mencionan el financiamiento del sistema universitario, la declaración de emergencia pediátrica, regímenes de promoción industrial, la distribución de recursos entre provincias y reformas previsionales. “No puede un cuerpo democrático funcionar en condiciones de bloqueo interno”, advierten.
El texto también apunta contra el Poder Ejecutivo por no haber enviado el proyecto de presupuesto correspondiente a los ejercicios 2024 y 2025. “La falta de remisión por parte del Ejecutivo y la consecuente inacción de la Comisión de Presupuesto y Hacienda consolidan un régimen de manejo absolutamente discrecional de los fondos públicos”, sostiene el documento, firmado por legisladores como Victoria Tolosa Paz, Germán Martínez, Carlos Heller, Cecilia Moreau, Pablo Yedlin y Sergio Palazzo, entre otros.
La tensión en torno del funcionamiento de las comisiones escaló la semana pasada, cuando la oposición logró emplazar -en una sesión especial- a las comisiones de Presupuesto y de Educación, presididas por Espert y Alejandro Finocchiaro (Pro), respectivamente.
Ambas deben reunirse este martes para dictaminar los proyectos de financiamiento universitario, que cuentan con respaldo mayoritario. La misma estrategia se aplicó a la emergencia en salud pediátrica, en medio del conflicto con el Hospital Garrahan: este mediodía se convocó también a un plenario de las comisiones de Salud, Familia y Presupuesto.
Ya están convocados los plenarios de comisiones para tratar los emplazamientos que aprobamos en la última sesión.
El martes 8 de julio avanzaremos con los dictámenes para Financiamiento Universitario y Emergencia en Pediatría – Garrahan. pic.twitter.com/9bbxoSuUmr
— Diputados UP (@Diputados_UxP) July 4, 2025
Esa última sesión de Diputados terminó con una escena bochornosa con Espert como parte de los protagonistas. Las diputadas kirchneristas Paula Penacca, Roxana Monzón y Florencia Carignano acusaron al libertario de mantener cerrada la comisión y lo tildaron de “cagón”. El hecho se relacionó, también, con el ataque a la casa de Espert, tras la detención de la concejal kirchnerista de Quilmes Eva Mieri y otros tres sospechosos involucrados en la agresión por orden de la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado.
La disputa por el control de la agenda legislativa se replica en el Senado, donde la comisión de Presupuesto -presidida por el libertario Ezequiel Atauche– también está paralizada. La semana pasada, senadores opositores se autoconvocaron sin él y emitieron dictamen sobre tres iniciativas demoradas: la ley de recomposición jubilatoria, la prórroga de la moratoria previsional y la declaración de emergencia en materia de discapacidad.
Aunque el secretario parlamentario de la Cámara alta, Agustín Giustinian, se negó a convalidar formalmente la reunión, el gesto político fue claro: ante la pasividad del oficialismo, el Congreso empieza a romper la parálisis desde adentro.