Una de las principales megalópolis del mundo, la brasileña San Pablo es un conglomerado donde habitan más de 22 millones de personas. Y como toda ciudad desbordada por tamaña población, uno de sus principales problemas es el tránsito urbano. Las calles rebosan de automóviles, y trasladarse de un lugar a otro puede ser un lento calvario con vehículos que avanzan a paso de hombre en horas pico. Pero este fin de semana, varios de esos autos de lujo que despiertan admiración cuando uno los observa rodando por las rúas paulistas podrán desquitarse y acelerar a fondo para demostrar toda su potencia. Y dos argentinos serán protagonistas.
San Pablo tiene toda una tradición fierrera, y esa tradición tiene una catedral: el circuito popularmente conocido como Interlagos, aunque en realidad su nombre oficial es José Carlos Pace en homenaje al malogrado piloto de Fórmula 1 que cosechó ahí en 1975 su único triunfo en el llamado Gran Circo. El intrincado trazado paulista -que incluye la famosa “S de Senna”- recibirá el fin de semana a la máxima categoría mundial del automovilismo de resistencia de la FIA, el World Endurance Championship ( o WEC, Campeonato Mundial de Resistencia), que con esta carrera pone en marcha la segunda mitad de la temporada.
La primera parte del año contó con pruebas en Qatar (Lusail), Italia (Imola), Bélgica (Spa-Francorchamps), y Francia, donde se corrió la prueba emblemática de la categoría: las 24 horas de Le Mans. Ahora, las máquinas llegan a Sudamérica para disputarRolex 6 hours of Sao Paulo; posteriormente pasarán por Estados Unidos, Japón, y culminarán el calendario 2025 con las 8 horas de Bahréin.
Este sábado se corren las pruebas clasificatorias de ambas clases, y el domingo a las 11.30 se largan las 6 horas. La prueba se podrá ver en directo por el canal de YouTube de WEC.
Un campeonato de alta exigencia
El Campeonato Mundial de Resistencia lo disputan autos agrupados en dos clases: por un lado está la denominada Hypercar, y por otro la LMGT3, abreviatura de Le Mans Grand Touring 3. En San Pablo, habrá 18 vehículos de cada una, y las marcas que estarán presentes representan lo más granado del mundo motor: Ferrari, Porsche, Toyota, BMW, Aston Martin, Alpine, Mercedes.
Ahora bien: aunque ambas clases corren en el mismo circuito y al mismo tiempo durante las 6 horas que dura la competencia, cada una tiene características especiales y guardan una diferencia fundamental.
Esa diferencia radica en que los Hypercar son prototipos que combinan la más alta tecnología y están diseñados exclusivamente para lograr el máximo rendimiento expuestos a la presión de tener que soportar horas y horas girando a toda velocidad.
La categoría llega a Brasil después de correr las tradicionales 24 horas de Le Mans. Foto: gentileza WEC.
Ferrari llega como el dominador de la clase Hypercar este año, habiendo ganado todas las pruebas de la temporada hasta ahora con su trío de 499P. Uno de los equipos de la marca italiana -compuesto por el polaco Robert Kubica (viejo conocido de la F1), el chino Yifei Ye, y el británico Philip Hanson- viene de imponerse en Le Mans y buscará con toda seguridad repetir en San Pablo, apuntando a un doblete que hasta ahora nadie ha conseguido.
El equipo defensor del título en la clase Hypercar es el que componen Kevin Estre, Laurens Vanthoor, y André Lotterer, quienes a bordo de un Porsche Penske se quedaron con el campeonato 2024. Este año no vienen teniendo buenos resultados, y en tierras paulistas sólo estarán presentes los dos primeros pilotos del team.
De la calle a las pistas
Los participantes de la cateoría LMGT3, en cambio, son autos de producción industrial -si, esos mismos que se podrían observar por las calles paulistas a paso de hombre, o en cualquier otra ciudad del mundo- pero que han sido modificados para la alta competencia que impone el WEC. Relativamente nueva -comenzó en 2024 en reemplazo de la histórica GT-, en esta categoría encontramos Ferrari 296, Ford Mustang, Aston Martin Vantage, Porsche 911 y Corvettes entre otras máquinas, lo que asegura que lo más granado de los autos deportivos de calle rodará por los 4.309 metros de Interlagos.
Dentro del listado de pilotos que participan de la clase LMGT3 hay un nombre que se destaca por el apellido. Es el de Eduardo Barrichello, hijo del recordado Rubens que tantas temporadas de Fórmula Uno animó y que en dos ocasiones fue subcampeón de esa categoría.
En la clase Hypercar hay dos nombres que sonarán conocidos por peso propio. Uno de ellos es el inglés Jenson Button, campeón de la Fórmula 1 en 2009, y el otro es el danés Kevin Magnussen, con una larga trayectoria en la categoría estrella del automovilismo deportivo.
Las 6 horas de San Pablo se corren en el autódromo de Interlagos. Foto: gentileza WEC.
Pero para los argentinos hay dos pilotos cuyo nombre resultarán familiares. Uno con más experiencia, el otro con latentes expectativas de progreso.
Seis horas de San Pablo con dos argentinos al volante
El primero de esos nombres es el de José María López, un veterano de los campeonatos de resistencia que cuenta con pergaminos de sobra para ser considerado uno de los principales animadores y eximios conductores de estos autos. Tan es así que “Pechito” está considerado un piloto Platinum, máximo escalafón dentro de la categorización que se hace de los volantes deesta categoría (las restantes son Gold, Silver, y Bronze).
El oriundo de Córdoba, de 42 años, integra el equipo Akkodis ASP que corre con un Lexus RC F con el número 83 pintado en sus flancos junto al rumano Petru Umbrárescu y el australiano Clemens Schmid. Aunque la temporada está siendo irregular vienen de tener un buen desempeño en Le Mans, lo que les permitió sumar muchos puntos y se mantienen expectantes en el campeonato de pilotos.
López comenzó a correr en el Campeonato Mundial de Resistencia en 2017 en el equipo Toyota Gazoo, con el que ganó varias carreras y llegó a consagrarse subcampeón junto a Kamui Kobayashi y Mike Conway en la temporada 2018-2019.
En la temporada siguiente “Pechito” obtuvo el campeonato de pilotos y en 2021 ganó las 24 horas de Le Mans, convirtiéndose en el segundo argentino en obtener tamaño logro después del recordado José Froilán González.
El otro argentino es Nicolás Varrone, que competirá a bordo de un Porsche 963 del equipo Proton Competition junto al suizo Neel Jani y el chileno Nicolás Pino.
El nombre del oriundo de Ingeniero Maschwitz, de 24 años, comenzó a sonar en el último tiempo al anunciarse la llegada de la escudería Cadillac a la F1, ya que podría ser elegido para ocupar una butaca en ese equipo.