Si te despiertas una vez en la noche para ir al baño no deberías asustarte: esto es totalmente normal. Ahora, si la necesidad se repite más de dos veces podría indicar algún problema de salud, conocido como nocturia.
El consumo excesivo de líquidos antes de dormir y los problemas de próstata (en los hombres) son las causas más comunes de la nocturia.
Entre los mayores de 70 años, el problema puede ser fisiológico y deberse a los cambios hormonales y del ritmo circadiano.
Si el hábito está acompañado de otros síntomas característicos, podría ser una señal de que tienes diabetes.
La sensación constante de sed lleva a beber más agua y, en consecuencia, a orinar aún más.
Ir al baño durante la noche: ¿puede ser un signo de diabetes?
La relación entre la nocturia y la diabetes es directa porque el exceso de glucosa obliga a los riñones a eliminar más agua, lo que interrumpe el sueño.
La diabetes, en especial cuando no está bien controlada, se caracteriza por presentar niveles elevados de glucosa en sangre. Si esta concentración supera la capacidad de los riñones para reabsorber la glucosa, el exceso se elimina a través de la orina. Este proceso, llamado glucosuria, obliga a los riñones a trabajar más y a producir mayor cantidad de orina para expulsar el azúcar sobrante.
Este aumento en la producción de orina no se detiene durante la noche, por lo que las personas con diabetes suelen despertarse varias veces para ir al baño. Además, la pérdida de líquidos puede generar una sensación constante de sed, lo que lleva a beber más agua y, en consecuencia, a orinar aún más.
La micción frecuente, tanto de día como de noche, es uno de los primeros signos de diabetes, por lo que deberías prestar atención a este síntoma, en especial, si está acompañado de mucha sed, fatiga, visión borrosa o pérdida de peso inexplicada. La nocturia, en tanto, puede afectar la calidad del sueño.
La mayor frecuencia urinaria puede afectar los riñones (nefropatía diabética) y los nervios que controlan la vejiga (neuropatía diabética). Estos daños pueden alterar la capacidad de la vejiga para retener la orina o vaciarse completamente, provocando escapes, urgencia urinaria o dificultad para orinar.
En hombres mayores, la diabetes puede agravar problemas de próstata, como la hiperplasia benigna de próstata, lo que también se traduce en micciones nocturnas frecuentes.
En hombres mayores, la diabetes puede agravar problemas de próstata. Foto: Shutterstock.
Detectar la nocturia como síntoma temprano puede ser clave para el diagnóstico precoz de la diabetes. Ante la presencia de micción nocturna frecuente, es recomendable realizar análisis de sangre y orina para evaluar los niveles de glucosa y descartar complicaciones renales o infecciones.
El tratamiento de la diabetes, basado en dieta, ejercicio y medicación, ayuda a controlar los niveles de glucosa y, por tanto, a reducir la frecuencia de la micción nocturna. En casos donde ya existe daño renal o neuropatía, pueden requerirse tratamientos específicos para manejar los síntomas urinarios.
Otros problemas que pueden causar nocturia son: infección del tracto urinario; insuficiencia cardíaca; embarazo; tumor en la vejiga o la próstata; insuficiencia hepática y apnea del sueño.
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