El Hospital Madariaga, centro de referencia en Misiones, enfrenta una creciente demanda de tratamientos de hemodiálisis, impulsada principalmente por el ingreso de pacientes sin obra social y la complejidad de casos que llegan desde diferentes localidades. Para dar respuesta, el servicio incorporó cinco equipos de tecnología alemana que se suman a los diez existentes, totalizando 15 máquinas en funcionamiento.

“Como hospital público recibimos pacientes con y sin cobertura. La mayoría de los que ingresan son personas vulnerables que llegan a la guardia en situaciones críticas, con falla renal aguda o crónica”, explicó Irene Paz, responsable del área de nefrología.

Actualmente, el servicio asiste a 50 pacientes crónicos que deben conectarse a las máquinas tres veces por semana durante cuatro horas, sin interrupción por feriados. A ellos se suman los casos agudos diarios: “Además de los crónicos, realizamos diálisis para pacientes críticos, como los que presentan sepsis, complicaciones cardiovasculares o fallas renales tras cirugías. A veces tenemos más de diez casos de este tipo por día”, detalló Paz.

Las nuevas máquinas, de la marca B. Braun, permitirán tratamientos más personalizados y seguros. “Son equipos digitales que brindan información en tiempo real, optimizan la dosis y reducen riesgos de complicaciones. Esto hace que el tratamiento sea más eficiente y con un perfil individualizado”, sostuvo.

Paz destacó que el servicio funciona a máxima capacidad todos los días: “Trabajamos desde antes de las 6 de la mañana hasta las 10 de la noche, porque la diálisis es un soporte vital. No podemos decirle al paciente que espere”.

Además, desde enero, el hospital implementa el programa nacional CERCA para la detección temprana y tratamiento de la enfermedad renal crónica, con el objetivo de reducir la cantidad de personas que llegan a estadios terminales y requieren diálisis.