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Un escándalo con tintes increíbles sacude a la WNBA, la liga femenina del básquet de Estados Unidos, después de que dos partidos en la misma semana tuvieron que ser interrumpido porque desde las tribunas lanzaron juguetes sexuales al campo de juego. Esta situación provocó que las jugadoras reclamen un refuerzo en las medidas de seguridad en los estadios.
La gota que rebalsó el vaso fue el viernes, cuando el duelo entre las Golden State Valkyries y las Chicago Sky se detuvo brevemente durante el tercer cuarto, cuando los árbitros retiraron un juguete sexual de color verde neón que fue arrojado cerca de una de las jirafas que sostiene el aro.
Fue el segundo partido de las Valkyries que se interrumpió en la misma semana por el mismo motivo. El martes, el partido de las Valkyries contra Atlanta Dream se detuvo en el último minuto después de que se arrojó un juguete sexual a la pista.
«Es muy irrespetuoso, no le encuentro el sentido», declaró Elizabeth Sky, de Chicago, tras el último incidente del viernes.
«Es muy inmaduro. Quienquiera que lo haga tiene que madurar», completó Williams.
Isabelle Harrison, jugadora del Liberty de Nueva York, pidió en la red social ‘X’ (antes Twitter) que se mejore la seguridad tras el incidente del viernes.
«í¿SEGURIDAD ARENA?! íHola??! Por favor hazlo mejor. No es gracioso. Nunca fue divertido. Tirar CUALQUIER COSA a la cancha es muy peligroso», escribió.
