Julio César Salinas, chef y autor de la muestra fotográfica “Prisioneros del Sabor”, explicó que la iniciativa, presentada en el Complejo La Aventura de Posadas, es el resultado del taller de cocina que se realiza en el Correccional de Menores. La propuesta combinó la gastronomía y fotografía como medios de expresión y reconstrucción personal, reflejando tanto el aprendizaje de un oficio como las historias y recuerdos de los participantes.
El chef destacó que cada clase se convierte en un espacio de autoestima y creatividad. “Yo no soy artista, pero creo que los artistas necesitan libertad para crear, y eso se agradece a los directivos”, expresó. También subrayó la importancia del respeto hacia los jóvenes: “Agradezco a quienes brindaron silencio y respeto a cada expositor”.
Salinas señaló que el proyecto implicó desafíos personales.
Esta muestra se hizo sobre todo con mucho miedo, miedo propio, prejuicios de decir qué pensarán, cómo lo tomarán. Lo que aprendí es que el miedo solamente se gana con el amor”, afirmó.
El chef resaltó que el apoyo de su entorno cercano fue fundamental. “Todo este trabajo es gracias al apoyo de mi esposa. También agradezco a mi familia, a mis hermanos y a los amigos que son mi otra familia”, concluyó.