Rusia busca incluir el control del comercio y las armas en las conversaciones entre Trump y Putin

MOSCÚ — Un día antes de la reunión entre el presidente Donald Trump y el presidente Vladimir Putin de Rusia, el Kremlin señaló el jueves que, además de Ucrania, también estaba interesado en discutir otros temas, como los vínculos económicos y las armas nucleares.

Las declaraciones de Putin y su asesor de política exterior pusieron de relieve cómo, en sus relaciones con Washington, Moscú ha intentado diluir las conversaciones sobre el fin de los combates en Ucrania, mezclándolas con otros asuntos bilaterales.

En particular, Rusia se ha centrado en la posibilidad de discutir el control de armamentos y el restablecimiento de los lazos económicos con Estados Unidos.

Manifestantes sostienen una bandera ucraniana durante una protesta en solidaridad con Ucrania, antes de la reunión entre el presidente estadounidense Donald Trump y el presidente ruso Vladimir Putin, en Anchorage, Alaska, EE. UU., el 14 de agosto de 2025. REUTERS/Nathaniel Wilder

El jueves, Putin convocó a altos funcionarios en el Kremlin para informarles sobre la reunión del día siguiente.

Mensaje

En su discurso inaugural, Putin afirmó estar convencido de que Estados Unidos estaba realizando «esfuerzos muy enérgicos para detener los combates, poner fin a la crisis y alcanzar acuerdos que beneficien a todas las partes involucradas en este conflicto».

Agregó que un acuerdo sobre Ucrania “crearía condiciones de paz a largo plazo entre nuestros países, en Europa y en el mundo en su conjunto, si alcanzamos acuerdos en las próximas etapas en el campo del control de armas estratégicas ofensivas”.

Debido a la creciente hostilidad entre ambos países y a la disparidad de poder tras el colapso de la Unión Soviética, el régimen de control de armamentos que cimentó las relaciones entre Moscú y Washington durante la Guerra Fría se ha debilitado significativamente.

A principios de agosto, Rusia declaró que ya no acataría un tratado obsoleto que prohibía el despliegue de misiles de alcance intermedio.

El tratado de reducción de armas nucleares, firmado en 2011 durante un breve deshielo entre los dos países, expirará en febrero.

Más temprano el jueves, Yuri Ushakov, asesor de política exterior de Putin, informó a la prensa sobre los preparativos de Rusia para la reunión.

Dijo que era «obvio para todos que el tema central será la solución de la crisis de Ucrania».

«Pero, por supuesto, también se abordarán cuestiones más amplias para garantizar la paz y la seguridad, así como los problemas internacionales y regionales más actuales y urgentes», dijo Ushakov.

“Se espera un intercambio de opiniones sobre el desarrollo futuro de la cooperación bilateral, incluso en el ámbito comercial y económico”, declaró, y añadió:

“Quiero destacar que esta cooperación tiene un potencial enorme y, lamentablemente, desaprovechado”.

Intercambio

El comercio entre Rusia y Estados Unidos nunca ha sido significativo para las economías de ambos países y se ha reducido a cifras minúsculas en los últimos años.

Sin embargo, ambos países han cooperado en áreas sensibles como la extracción de petróleo y la industria aeroespacial.

Ushakov también anunció qué funcionarios rusos formarían parte de la delegación en la reunión.

La lista incluía al propio Ushakov, junto con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, y también al ministro de Finanzas, Anton Siluanov; Kirill Dmitriev, enviado de Putin para la inversión extranjera y la cooperación económica; y el ministro de Defensa, Andrei Belousov.

La inclusión de Belousov y Dmitriev en la delegación rusa fue otra indicación de que el Kremlin esperaba discutir asuntos económicos en la cumbre.

En los últimos meses, el Kremlin ha estado destacando los diferentes enfoques rusos y estadounidenses para poner fin a los combates en Ucrania.

En junio, Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, dijo que Rusia quería discutir las relaciones con Estados Unidos por separado de los esfuerzos para poner fin a la guerra en Ucrania, pero que los estadounidenses querían discutir primero la situación en Ucrania.

Mientras las conversaciones se prolongan, Rusia y Ucrania siguen intercambiando ataques con drones.

El jueves, drones ucranianos atacaron dos ciudades rusas, hiriendo al menos a 17 personas, según las autoridades locales.

Un dron impactó edificios de apartamentos en Rostov del Don, hiriendo a 13 personas, según el gobernador regional en funciones.

Al menos cuatro civiles resultaron heridos en la región de Bélgorod, cerca de la frontera con Ucrania, según el gobernador local.

c.2025 The New York Times Company