El objetivo de la humanidad de llegar a Marte se vuelve cada día más plausible. Ahora, Blue Origin, la empresa de Jeff Bezos, apoyará a la NASA en su carrera para aterrizar en el planeta rojo en una nueva misión programada para 2028.
Cómo es la nave con la que Jeff Bezos ayudará a la NASA
El Orbitador de Telecomunicaciones de Marte (MTO, por sus siglas en inglés) es una nueva nave espacial de alto rendimiento construida sobre la plataforma Blue Ring, que ya existe en el mercado y es asequible, ya está lista para apoyar a la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), de acuerdo con la empresa.
Blue Origin informó que su nueva nave espacial, el Orbitador de Telecomunicaciones de Marte (MTO), fue diseñada para establecer una red de retransmisión de comunicaciones de alta velocidad entre la Tierra y Marte. La misión, programada para 2028, cuenta con la flexibilidad necesaria para satisfacer las futuras necesidades de exploración humana y robótica de la NASA.
El MTO proporcionará comunicaciones fluidas mediante múltiples enlaces orientables de alta velocidad, que se complementarán con un pequeño número de satélites de retransmisión de Frecuencia Ultra Alta (UHF, por sus siglas en inglés). Estos satélites se desplegarán en la órbita baja de Marte y darán cobertura a los activos existentes en el Planeta Rojo y a las futuras actividades de descenso y aterrizaje.
El orbitador se basa en las propuestas comerciales ya existentes de Blue Origin para la Retransmisión de Próxima Generación de Marte y el Retorno de Muestras de Marte.
La tecnología de la nave espacial de Blue Origin para Marte
La nave espacial de Blue Origin cuenta con propulsión híbrida, eléctrica y química, que mejoran la capacidad de maniobra para ampliar considerablemente las posibilidades de llegar a Marte, y disminuir los riesgos de la misión programada para 2028, agregó la firma.
Con esta tecnología, el MTO puede llegar al Planeta Rojo en condiciones “realmente difíciles”, al complementar de manera eficiente la energía de lanzamiento con energía eléctrica, algo que es imposible de lograr con sistemas exclusivamente químicos.
La propulsión solar eléctrica permite destinar mayor masa de carga útil a comunicaciones de alto rendimiento, con lo que puede transportar más de 1000 kilogramos de carga a la órbita marciana, según los requisitos específicos de la misión de la NASA.
Por si fuera poco, el MTO también ofrece capacidades de procesamiento en el borde, almacenamiento de datos e Inteligencia Artificial para apoyar las futuras misiones científicas y de exploración en Marte.
Las primeras imágenes y la primera misión a Marte
La Misión Mariner 4 de la NASA llevó Marte a las salas de los ciudadanos de Estados Unidos en 1965, cuando las televisiones mostraron imágenes borrosas en blanco y negro del planeta vecino, que mostraban un paisaje desértico y lleno de cráteres.
En esa ocasión, la nave espacial tomó 21 imágenes, las primeras captadas de otro planeta en la historia, mientras volaba a unos 9.846 kilómetros (6.118 millas) por encima de la superficie marciana.
Después de esta misión, la administración preparó nuevas incursiones al Planeta Rojo y 11 años después, el 20 de julio de 1976, Viking 1 se convirtió en la primera nave espacial en pisar Marte, además de enviar la primera imagen en alta resolución que se envió a la Tierra.
Las nuevas fotografías obtenidas con la cámara de 360 grados del Viking 1 generaron entusiasmo entre los científicos al dimensionar el valor del suelo marciano, por lo que el siguiente paso era una misión que incluyera una nave espacial robótica capaz de conducir por el paisaje extraterrestre.