La inteligencia artificial se convirtió en uno de los motores de cambio más fuertes dentro del mundo laboral. Su capacidad para automatizar tareas abre un debate urgente sobre cómo reorganizar las jornadas de trabajo en Estados Unidos.
Bill Gates, cofundador de Microsoft, fue uno de los primeros en advertir que la tecnología permitiría reducir el tiempo dedicado al empleo. Actualmente, sus reflexiones encuentran eco en otros ejecutivos que ven posible trabajar menos días sin que eso afecte la productividad. A su vez, cada vez más CEO defienden la idea de una semana laboral de tres días, impulsada por la IA.
Debate por la IA: unos advierten «un apocalipsis laboral», otros proponen una semana laboral de tres días
El avance de la inteligencia artificial enfrenta a la industria tecnológica con posturas muy diferentes. Dario Amodei, CEO de Anthropic, advirtió que la automatización puede derivar en “un apocalipsis laboral que dejaría a millones de trabajadores fuera del mercado”.
En contraste, Demis Hassabis, director ejecutivo de Google DeepMind, sostuvo que la IA dará inicio a “una era de abundancia sin precedentes en la historia, capaz de liberar tiempo y energía para que las personas lo inviertan en bienestar y desarrollo personal”.
Experiencias iniciales en empresas muestran que reducir días de trabajo puede aumentar productividad y disminuir el agotamiento. Foto ilustrativa Pexels
Entre quienes proponen cambios concretos está Eric Yuan, CEO de Zoom, que declaró: “Creo que si la IA puede mejorar nuestras vidas, ¿por qué necesitamos trabajar cinco días?”. Para él, las jornadas de tres o cuatro días se volverán inevitables y abrirán paso a nuevas formas de organización profesional.
Bill Gates reforzó esa visión cuando asistió a The Tonight Show con Jimmy Fallon. Allí planteó: “¿Cómo serán los trabajos? ¿Deberíamos trabajar solo dos o tres días a la semana? Si lo analizamos en perspectiva, el propósito de la vida no es solo trabajar”. Para el fundador de Microsoft, la clave estará en usar la innovación tecnológica para liberar tiempo y equilibrar la vida personal con las demandas laborales.
La adopción de una semana laboral de tres días enfrenta desafíos según el tipo de industria y tareas involucradas. (AP Photo/Alex Brandon)
Cuáles serían los beneficios y desafíos de una semana laboral reducida
Los primeros ensayos muestran que la reducción de la jornada no es una simple teoría. Exos, una firma de coaching de rendimiento en Estados Unidos, implementó semanas más cortas y comprobó que el agotamiento de los empleados cayó a la mitad, mientras que la productividad aumentó un 24%.
Aun así, los CEO reconocen que no todos los sectores podrán aplicar el modelo de manera uniforme. En áreas administrativas o programáticas, la IA permite mayor automatización y flexibilidad, mientras que en trabajos creativos, físicos o de atención directa con humanos el cambio requerirá nuevas soluciones.