Una profesora de preescolar fue captada por las cámaras de seguridad en un momento de suma consternación. Un niño que concurre al jardín fue atado a una silla en la hora del almuerzo, lo que provocó inmediatas reacciones por parte de las autoridades de la institución.
La policía inspeccionó lo sucedido en la escuela privada «VINCI» de Alexandria North en Virginia, Estados Unidos. Es que la gravedad del hecho obligó a una intervención de los organismos especializados en el cuidado de los menores de edad.
El pequeño de 1 año y 8 meses padeció esta maniobra realizada por su maestra en plena hora del almuerzo. Si bien el cuidado de niños «no es fácil», esta es «una situación que jamás debe ocurrir», dijo Acacia Komelasky, una residente de la zona, a 13 News Now.
«Como exprofesora, eso jamás debería ocurrir. Somos seres humanos. Ni siquiera contengo a mi animal de esa manera», afirmó la especialista en educación. “Hay que darles el ejemplo y enseñarles cuál es el comportamiento correcto, pero nunca una coerción, porque eso genera miedo y crea una barrera”, añadió.
La justificación de la maestra despedida por atar al pequeño
La docente -de quien no se brindó la identificación- utilizó una «manta delgada» para retener a una silla al niño de casi 2 años. La escena continuó durante 22 minutos en la hora del almuerzo, indicó la inspección realizada por el Departamento de Servicios Sociales de Virginia.
Tras la verificación del incidente ocurrido el 13 de agosto, la maestra, que trabajó allí durante cuatro años, fue despedida. El motivo se restringió a una violación de las políticas de la institución, ya que la policía descartó cualquier tipo de actividad delictiva.
Además de la maestra, hubo otro docente sancionado. Foto: WUSA9/YouTube
Sin embargo, la profesora intentó justificarse, según se lee en las declaraciones recolectadas por el respectivo departamento. Declaró que «no le habían atado la manta con fuerza».
Además, la razón por la que lo habría hecho fue porque el niño «tiró comida al suelo» y se levantó de la mesa cuando «se suponía que debía estar comiendo«.
A pesar de que el niño, mientras estaba atado a la silla,ni se sentía angustiado«, según servicios sociales, se hizo un determinante recordatorio al equipo docente. El DSS aludió enfáticamente a la política de tolerancia cero ante cualquier tipo de conducta inapropiada.
Estos actos prohibidos van desde la restricción del movimiento mediante ataduras o amarres; forzar a un niño a asumir una posición incómoda; y obligarlo a hacer un ejercicio como castigo, hasta golpear o castigarlo físicamente.
El otro docente que presenció la situación y no hizo nada
Otro adulto entró al aula mientras el niño estaba atado a la silla, y no lo desató. Su no intervención le valió una amonestación formal, según el DSS. Al mismo tiempo, el personal de la escuela tuvo que iniciar una capacitación sobre “cómo reconocer y denunciar el abuso y la negligencia infantil”.
La directora de la escuela aseguró que el niño «no sufrió daños». Foto: WUSA9/YouTube
La directora de la escuela, Dra. Dan Yang, afirmó que la maestra despedida «cometió un gran error al violar las normas», pero -aseguró a 7 News- «no hay pruebas de que el niño haya sufrido daño o abuso alguno».
«En el cuidado infantil hay muchas cosas que no son blancas o negras. Sin embargo, creemos firmemente que las normas y regulaciones deben cumplirse independientemente de nuestros sentimientos hacia la persona en cuestión», dijo Yang.