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Del voto femenino a la igualdad: 78 años de conquistas y desafíos
- Creado: 24 Septiembre 2025
La sanción de la Ley Nº 13.010, conocida durante muchos años como “Ley Evita”, puede explicarse en el contexto de ampliación de derechos sociales para las mujeres promovido por el gobierno de Juan Domingo Perón.
Fue sancionada el 9 de septiembre de 1947 en la Cámara de Diputados y promulgada el 23 de septiembre, estableciendo este último como el Día Nacional de los Derechos Políticos de la Mujer, fecha en la que se reconoció la igualdad de derechos políticos entre mujeres y hombres.
En este sentido, el voto femenino se consideró un verdadero acto revolucionario para las mujeres argentinas cuya mayoría pertenecía a las clases populares o trabajadoras, y esto significó no solo el derecho al voto, sino una ampliación de su participación social, cultural y política.
Antes de esta ley, la inclusión política femenina era nula: las mujeres podían militar en partidos, pero no decidir con su voto ni postularse a cargos. Fue celebrada como una ampliación de la democracia y tuvo su primera gran prueba en las elecciones de 1951, donde por primera vez las mujeres votaron y también resultaron electas. En esa elección, 23 diputadas y 6 senadoras ingresaron al Congreso de la Nación, marcando un hito histórico.
En las décadas siguientes, la representación femenina creció de manera paulatina, pero todavía era minoritaria. Recién en 1991 se sancionó la Ley de Cupo Femenino, que estableció que al menos el 30% de las candidaturas legislativas debían ser ocupadas por mujeres. En 2017, un nuevo paso llegó con la Ley de Paridad de Género, que fijó un 50% de representación femenina en listas de candidatos, impulsando una presencia más equitativa.
Hoy, las mujeres ocupan un rol central en la política argentina: presiden bloques legislativos, integran gabinetes, gobiernan provincias y municipios, y son protagonistas en el Poder Judicial.
Mujeres al frente de la Justicia Misionera
En la Provincia, el Superior Tribunal de Justicia tiene como mayor representante femenino a la presidente, Rosanna Pía Venchiarutti Sartori, electa en diciembre del 2019 para los próximos períodos. Su gestión está impulsada por la digitalización como eje central y una mirada crítica y comprometida con la historia institucional. Venchiarutti Sartori, también preside el Consejo de la Magistratura hasta el año 2027.
Por otro lado, la ministra Ramona Beatriz Velázquez ejerció como presidente del STJ el período que abarcó desde el año 2012 al 2015 promulgando la creación de Juzgados de Familia y Violencia Familiar para la Primera Circunscripción Judicial.
De modo similar, la ministra Cristina Irene Leiva, fue electa en agosto para ocupar el cargo de presidente del Comité Ejecutivo de la Junta Federal de Cortes y Superiores Tribunales de Justicia de la Región NEA, lugar que ocupará en la Comisión Directiva por los próximos dos años.
La integración de mujeres en los más altos cargos del Poder Judicial de Misiones y en el Consejo de la Magistratura, constituyen un avance significativo en la consolidación de una justicia representativa y plural con el objetivo de reflejar el compromiso de la provincia con la igualdad de oportunidades y fortalecimiento institucional.
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