
Los comercios de ropa y calzado del centro posadeño atraviesan un contexto económico adverso, marcado por la caída del poder adquisitivo y la fuerte competencia con el comercio fronterizo, especialmente del lado paraguayo. Así lo expresó Fernando Solís, encargado de locales del rubro en la capital misionera.
“Se ve un poco afectado por el tema económico y la competencia de la frontera. Está complicado competir con el vecino por la cantidad de impuestos que tenemos nosotros”, sostuvo Solís, quien explicó que la carga impositiva local encarece los precios respecto a los productos que se pueden conseguir en Encarnación.
Además, destacó que la financiación con tarjeta de crédito y los programas de cuotas sin interés son herramientas fundamentales para mantener el movimiento comercial.
“Nos ayuda mucho la financiación. Hay posibilidad de comprar en cuotas, con reintegros, y también tenemos promociones por pago en efectivo”, explicó.
Pese a las dificultades, Solís aseguró que muchos clientes valoran la calidad de los productos argentinos, que considera superior a los del país vecino.
“Hacemos hincapié en la calidad. Nuestra moda también es distinta a la paraguaya o brasileña”, dijo, aunque reconoció que la competencia es dura y la situación del sector es crítica.
“La gente concurre, pero es difícil”, cerró el comerciante, dejando en claro que la permanencia del rubro depende cada vez más del ingenio, las promociones y la fidelización de los clientes locales.