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No fue un partido más para él. Por la previa y el mismo durante. Se sabía que iba a ser protagonista. Por cómo se fue de Racing y por su llegada a River, justo un competidor de la Acadé a nivel local y en la Libertadores. Los hinchas racinguistas se lo hicieron saber desde ese entonces y en la misma entrada en calor en Rosario por la Copa Argentina con el «que no salta es un traidor»y «va a mirar la copa por TV».
Maxi Salas, el gran protagonista de esta historia, contestó en la cancha. En apenas cinco minutos de juego, la mandó a guardar para el 1-0 de River -que sería final- y no gritó el gol por respeto a pesar de los mensajes recibidos desde las tribunas. Súper profesional, se dedicó solamente a jugar. Y eso que le tiraron hasta una zapatilla…
River Plate –
El saludo de Salas y Quintero con el banco de racing
Video: TyC Sports.
Más allá del final caliente entre los planteles, trató de ser respetuoso con sus ex compañeros, a los que había saludado apenas entrado al campo de juego. A pesar del cruce con Agustín Almendra, la cosa no pasó a mayores dentro de un clima bien espeso entre ambos equipos.
River Plate –
«El que no salta, es un traidor», el cántico de los hinchas de Racing contra Maxi Salas
Video: Olé.
River Plate –
Salas marcó el 1 a 0 de River
Video: TyC Sports.
Ante los micrófonos fue agradecido con la gente de Racing y no polemizó a pesar del match quenchi. Trató de cerrar la historia de manera correcta. Pero sí le pegó otra vez a la dirigencia comandada por Diego Milito, algo que ya había hecho cuando se marchó del club por las diferencias entre ambos. Eso no sanó.
Racing –
El palito de Maxi Salas a Diego Milito
TyC Sports.
«Tratamos de no invadirlo, de no llenarlo de cosas, darle confianza, que lo tome como un partido más. Fue acompañarlo en ese proceso en la previa«, señaló por su parte Marcelo Gallardo sobre cómo prepararon al correntino, héroe para unos y villano para otros en la cancha del Canalla.
Salas y el pulga arriba (River oficial).
Un MS que, después de todo lo ocurrido, tuvo lugar para tomarse un respiro y, para el mundo de las redes sociales, sacarse una selfie con la hinchada de River de fondo. La que lo aplaudió al ser reemplazado en el ST ante la otra mitad repudiándolo. Un Salas que levantó el pulgar para celebrar este triunfo con un gol pesado de su autoría. Y que espera seguir aportando otros más para un equipo que lo necesita.
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