En Wanda se llevó adelante una reunión donde participaron instituciones educativas, municipales, judiciales, legislativas y de seguridad ante los hechos de violencia entre jóvenes que se registraron semanas atrás en la localidad a la salida de un local bailable, y otros hechos aislados.

También se habló de hechos de inseguridad en los distintos barrios, situaciones que provoca gran preocupación, por lo que se decidió armar una mesa de trabajo compromiso de actuar de manera conjunta, sostenida en el tiempo, ordenada y comprometida con el respeto mutuo.

En este sentido se emitió un comunicado invitando a las familias a ser el primer espacio de contención, acompañamiento y reflexión y asumir un rol activo en la educación y el cuidado de sus hijos. Y se establecieron algunas pautas.

Tener un límite en los horarios de salida y regreso, especialmente en adolescentes. Evitar la permanencia de menores de 18 años en la vía pública después de las 22, salvo en compañía de un adulto responsable. No permitir la conducción de vehículos o motocicletas sin la documentación correspondiente. Supervisar la participación en fiestas privadas, evitando el consumo de alcohol y otras sustancias. Conocer a los amigos de sus hijos y los lugares que frecuentan.

Mantener un vínculo cercano con la escuela, conversar con docentes y directivos sobre el rendimiento y la conducta. Fomentar el diálogo en la familia como la primera herramienta para resolver problemas. Impulsar la participación de los jóvenes en actividades deportivas, culturales, religiosas o comunitarias.

Esto es el inicio de un plan de acción comunitario que seguirán trabajando y evaluando en conjunto con todas las instituciones.