El subastador pensó que perdía su tiempo mostrando ese viejo violín estropeado y arañado, pero aun así, lo mostró. “¿Cuánto ofrecen, buena gente?”, gritó. “¿Quién hará la primera oferta? “¡Un dólar, un dólar!”, se escuchó. “¡Dos!”. “¿Sólo dos dólares? ¿Hay alguien que dé tres?”. “¡Tres dólares!”. “¡Tres dólares, a la una, a las dos… Que se va por tres”. Pero ¡no! Un hombre canoso se puso de pie, llegó adelante y tomó en sus manos el arco. Limpiando el polvo del viejo violín armonizó sus cuerdas y tocó una melodía muy tierna. Al cesar la música el subastador dijo, en voz muy baja y más bien para sí: “¿Cuánto daría yo por tener este viejo violín?”. Y tomándolo con más cariño lo volvió a levantar: “¡Cien dólares! ¿Y quién da doscientos?”. “¡Doscientos!… ¡Trescientos!”, ofrecieron. “¡Trescientos a la una, a las dos… y se va y se fue!”, exclamó. Algunos lloraban y otros aplaudían. “No podemos comprender -se decían- ¿Qué cambió su valor?”. Alguien dijo que fue “el toque de la mano de un maestro”.
Muchas personas sienten que sus vidas están fuera de tono. No saben cómo aprovechar todos los recursos y talentos que disponen. No saben cómo convertir sus excusas en razones. No pueden ver las oportunidades que existen dentro de las crisis. No le encuentran sentido a lo que hacen. No saben cómo ponerse en acción y, a similitud del viejo violín, se subastan baratamente a la multitud siguiendo el viaje de la vida como un juego que no requiere pensar. Pero un día, el maestro aparece. La gente no comprende cómo él puede encontrar tanto valor en algo que ellos no pueden ver. El secreto del maestro es mirar más allá de las apariencias y conectarse con la verdadera alma de las cosas. “La diferencia entre lo que hacemos y lo que somos capaces de hacer bastaría para solucionar la mayoría de los problemas que hay en el mundo” (Gandhi).
Claudio M. Perez Bobasso [email protected]
OTRAS CARTAS
Los problemas de la gente, más allá de Espert
La prensa no ha cejado de informar acerca del affaire del diputado José Luis Espert (que ayer finalmente bajó su candidatura bonaerense). Al ciudadano de a pie le importa tres belines tal acontecimiento sino cómo hace para llegar a fin de mes con su pobre salario; al jubilado, cómo sobrevive y puede comprar medicamentos; al empresario chico y mediano, cómo incrementar sus ventas; al contribuyente, cómo afrontar los incrementos de los impuestos y tasas; al ama de casa, cómo hacer malabares para alimentar a los suyos; al recién egresado universitario, cómo conseguir trabajo digno; al estudiante, cómo lograr que no haya tanta deserción injustificada de docentes y así a tantos otros.
Roberto A. Meneghini [email protected]
Denuncia que falta iluminación en autopistas
¿Cuántos años más van a consentir el incumplimiento del contrato de concesión de sus autovías a la empresa Autopistas del Sol?
Sigue pasando el tiempo y cada vez son más los tramos del Acceso Norte y otros de la avenida General Paz sin iluminación o sin la iluminación adecuada para circular adecuadamente.
Llegando al cruce de los ramales Pilar (8) y Campana (9), antes de la unión con el ramal central, sentido mano a Capital Federal, la autopista está completamente oscura desde hace meses. Cuando uno reclama, la respuesta es siempre la misma: que se roban los cables y que, si los reponen, los vuelven a robar. ¿Y yo qué culpa tengo?
Así, cada vez que pase por el peaje les podría decir que me robaron la billetera y que, si la repongo, me la van a volver a robar, por eso no puedo cumplir con mi parte del contrato de uso de la autopista. Pero yo no puedo hacerlo; ellos, sí.
Solo iluminaron un tramo luego del famoso intento de robo entre motos del 27 de abril pasado, en el cual el delincuente iba mitad colgado de la moto y mitad caminando, tranquilamente, delinquiendo con total impunidad, ayudado por el embotellamiento diario, habitual en toda la traza, y amparados por la más absoluta oscuridad.
Demás está decir que esta falla en la iluminación no es un detalle menor como pretenden mostrarlo. Esto compromete seriamente la seguridad pública de todos los usuarios, pues aumenta el riesgo de accidentes y fomenta los hechos de inseguridad que cada vez son más frecuentes.
El eslogan de Autopistas del Sol es: “Tu seguridad es nuestra prioridad”. No lo estaría percibiendo…
Martín Uriburu [email protected]
Newsletter Clarín
Recibí en tu email todas las noticias, coberturas, historias y análisis de la mano de nuestros periodistas especializados
QUIERO RECIBIRLO
Tags relacionados
- Jose Luis Espert