Los afiches de las películas en los catálogos streaming, son la presentación de un film. Como en la época de las cajitas de VHS en los videoclubes, que buscaban despertar en el espectador un interés sobre esa pieza, ahora los abultados menús de las plataformas presentan vistosos diseños para atraer la atención. Claro que la ventaja con la que corren esos diseños digitales, en contra de las recordadas cajas analógicas de los videocasetes, es que ahora se pueden modificar a gusto. Y justamente por ese motivo es que en varios países, Amazon Prime Video tomó una decisión con las portadas de la saga James Bond, que generaron una respuesta negativa de manera inmediata.
Amazon have removed the guns from their Bond posters, giving the tantalising impression that Sean Connery and Pierce Brosnan think you’re a wanker. pic.twitter.com/tyjMVD1mit
— rufus jones (@rufusjones1) October 3, 2025
Durante el pasado viernes, numerosos suscriptores de Amazon Prime Video en Reino Unido notaron que todos los afiches de las películas de James Bond habían sido retocados. La modificación, consistía en que ninguna imagen presentaba armas de fuego. De ese modo, icónicos afiches como el de Dr. No, Golden Eye, Spectre o A View To Kill, mostraban al agente 007 sin ningún tipo de revolver. Desde luego que esto solo lograba que Bond quedara en poses extrañas, con su puño cerrado de manera muy poco natural.
En redes, la indignación fue inmediata. Algunos hablaron de “vandalismo cultural”, otros mostraron con vehemencia su bronca al respecto, y como no podía ser de otra manera, también surgieron memes que se tomaron con humor las modificaciones a los posters.
Missed opportunity to showcase some Q gadgets tbh… https://t.co/w4kVXy9mqN pic.twitter.com/57LjIwWi1I
— Sean Longmore (@ThatTallGinger) October 3, 2025
Frente a los comentarios negativos, los afiches fueron eliminados y reemplazados por imágenes de las películas respectivas. Claro que según notaron pronto los fans, en ninguna de esas fotos aparecía un arma.
Ahora la preocupación del público, según distintas opiniones que comenzaron a circular en foros y redes sociales, tiene que ver con el futuro film del agente 007, que está en manos de Amazon. Si esta política por eliminar armas de fuego sigue adelante, ¿cómo hará el mítico Bond para aplicar su licencia para matar?
La llegada de Villeneuve
En junio de este año, se anunció al canadiense Denis Villeneuve como responsable de la aventura cinematográfica número 26 en la historia de 007, y todo el mundo empezó a preguntarse qué impacto tendrá esta noticia en la nueva etapa de Bond imaginada por su flamante dueño, el gigante del comercio electrónico Amazon, y qué tipo de historia será capaz de contar el realizador de Sicario, La llamada y la trilogía de Duna dentro de este mundo tan particular.
En su primera declaración, Villeneuve quiso llevar tranquilidad, sobre todo a quienes tienen puesta desde hace mucho tiempo la camiseta de 007. “Soy un fanático incondicional de Bond. Para mí es territorio sagrado. Pretendo honrar la tradición y abrir camino a muchas nuevas misiones futuras”, dijo el realizador, que además habló de su vínculo personal con este universo y el recuerdo de su padre, con quien veía siendo chico las primeras películas de la serie protagonizadas por Sean Connery.
Lo más probable, en una primera aproximación, es imaginar una suerte de cruce entre la tradición bondiana y la concepción visual que Villeneuve impuso hasta ahora en su filmografía. Podemos esperar, por ejemplo, un trabajo potente y meticuloso en materia fotográfica (Duna, Sicario y La llamada entran en el espectador por los ojos), al servicio de una atmósfera por lo general perturbadora, incómoda y sombría. El diseño de producción, el sonido y la música incidental complementan ese trabajo visual con una energía parecida.
En la última etapa del personaje, sobre todo en las películas dirigidas por Sam Mendes (Operación Skyfall, Spectre) Bond se mete de lleno en la más cruda y complicada actualidad geopolítica, con un cuadro que incluye la presencia de atentados terroristas en primer plano. No parece muy plausible que 007, tan conectado desde el origen con el servicio secreto británico, se sume a partir de ahora a la galería de los personajes que abundan en el cine de Villeneuve y no pertenecen al mundo real.