Cada 10 de octubre se celebra en Misiones el Día Provincial del Técnico de Laboratorio, una fecha establecida por la Ley N.º VI-251, sancionada por la Cámara de Representantes en octubre de 2020, en reconocimiento a una labor esencial dentro del sistema sanitario.
Los técnicos de laboratorio son profesionales altamente capacitados, cuya precisión y rigurosidad en los análisis permiten a médicos y equipos de salud tomar decisiones fundamentales para la prevención, el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades. Su formación técnica especializada les permite operar equipamiento avanzado, aplicar protocolos de análisis con exactitud y mantenerse a la vanguardia de los avances científicos y tecnológicos que transforman permanentemente la medicina moderna.
En este contexto, se destaca la trayectoria de Gladys Marylin Sousa, una profesional con más de 40 años de servicio en el ámbito sanitario provincial, cuya dedicación, compromiso y vocación de aprendizaje continuo reflejan la esencia del trabajo técnico en salud pública.
Su carrera comenzó en el ex Laboratorio Central —hoy Laboratorio de Alta Complejidad de Misiones (LACMI)— durante la gestión del entonces secretario de Salud, Leandro Mieres. “Comencé como auxiliar de laboratorio, y hoy soy Licenciada en Gestión de Políticas Públicas. Estoy profundamente agradecida al Estado, que me brindó las herramientas para capacitarme y ser lo que soy”, expresó Sousa, quien hoy es considerada una referente dentro del sistema sanitario misionero.
A lo largo de su recorrido profesional, fue testigo de una transformación profunda en el campo de los análisis clínicos. “Cuando ingresé, los procedimientos eran manuales, con mucho trabajo de mesada y una comunicación más personalizada con los médicos. La llegada de la automatización y las nuevas tecnologías cambió todo radicalmente. Fue un desafío, pero había que adaptarse”, recordó.
Sobre el rol del técnico de laboratorio, Sousa subrayó que se trata de un pilar fundamental del sistema de salud. “Realizamos la toma y preparación de muestras, análisis clínicos, mantenimiento de equipos, control de calidad y elaboración de informes. Nuestro trabajo se extiende a distintos entornos: hospitales, clínicas, laboratorios de investigación, industrias farmacéuticas y alimentarias, control de calidad de agua y centros biomédicos”, detalló.
Además de su labor técnica, Sousa destaca la importancia de los valores humanos en la profesión: “La responsabilidad, la ética profesional, la empatía con el paciente, la actitud proactiva, la capacidad resolutiva, la formación continua y la buena comunicación son esenciales en nuestra tarea cotidiana”.
Uno de los aspectos que más valora de su carrera es su experiencia como tutora de prácticas hospitalarias para estudiantes de Bioquímica y de la Tecnicatura en Laboratorio. “Acompañar a las nuevas generaciones, participar de congresos nacionales y enriquecerme con nuevos conocimientos fueron experiencias significativas. También guardo con cariño el recuerdo de pacientes a los que he atendido y escuchado”, compartió.
Durante la pandemia de COVID-19, aunque fue exceptuada de la atención directa por decisión sanitaria, Sousa reconoció el rol protagónico que tuvo el personal técnico. “El trabajo de los técnicos fue fundamental. Se tomaban muestras constantemente para la detección del virus, y la demanda superaba ampliamente la capacidad habitual del sistema”.
Con una vida dedicada al servicio público, Gladys Marylin Sousa encarna el compromiso, la evolución profesional y la pasión por una labor que combina ciencia, técnica y humanidad. En su día, su historia representa una inspiración para quienes eligen el camino del conocimiento al servicio de la salud.