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El futuro de Ignacio Miramón en Boca ya está escrito. Borrado en este ciclo, el volante de 22 años, que arribó a mediados de 2024 desde el Lille a préstamo por 18 meses, no seguirá en el club. Su contrato vence en 15 días (el 30 de noviembre) y el Xeneize no hará uso de la opción de compra de 3.5 millones de euros. Por lo que el volante deberá volver a Francia. Así, tras la salida de Chiquito Romero (rescindió y ya se sumó a Argentinos), el club ya tiene confirmada una desvinculación más…
De la expectativa a la realidad
Cuando Boca lo presentó (14 de agosto de 2024), Miramón cargaba con una doble etiqueta: la de un joven volante que había tenía un alto nivel en Gimnasia, que venía desde Europa pero que, al mismo tiempo, llevaba seis meses de inactividad en el Lille. La apuesta buscaba darle rodaje, despertar ese rendimiento que había tenido en el Lobo, pero la ecuación nunca cerró.
Boca Juniors –
Miramón y el fanatismo de toda su familia por Boca
Debutó de la mano de Diego Martínez en el 3-2 ante San Lorenzo, en agosto, y en total jugó cuatro partidos; en el medio, su único superclásico. Con la salida del Gigoló, Mariano Herrón se hizo cargo en victoria 1-0 ante Argentinos en la Bombonera, donde sumó minutos. Con la llegada de Fernando Gago fue cuando más participación tuvo (11 partidos), siempre desde el banco, pero decía presente.
Sí tuvo el privilegio de jugar un superclásico.
Lo concreto es que el ex Gimnasia nunca logró sostenerse. Con Gago fue perdiendo espacio, con Herrón apenas participó y con la llegada de Miguel Russo directamente dejó de contar. Y si bien viajó al Mundial de Clubes y estuvo en el banco ante Benfica, Bayern y Auckland City, no sumó minutos.
Había mucha expectativa en él, pero la competencia lo relegó.
Su 2025 se redujo a apenas tres partidos oficiales: frente a Central Córdoba, Banfield y Estudiantes; su último partido, el 19 de abril (en ninguno completó los 90). Después de eso quedó colgado por Miguelo, que lo empezó a dejar afuera del banco. Para volver a verlo con la pechera de calentamiento nos tenemos que remontar en la eliminación de 16avos de Copa Argentina ante Atlético Tucumán por 2-1.
En definitiva, pasó estos últimos seis meses sin sumar minutos en el club y en el último tiempo directamente sin ser parte de la lista de citados, otra señal de que el final está escrito.
La competencia interna
El contexto tampoco lo ayudó. La llegada de Ander Herrera (a quien le dio la 21, que era suya), Williams Alarcón, el regreso de Battaglia al medio y, sobre todo, el retorno de Leandro Paredes lo empujaron aún más atrás en la consideración. En una zona del campo siempre competitiva, el ex Gimnasia no pudo hacerse un lugar.
En un año y medio, jugó 20 partidos oficiales, no convirtió goles y apenas en una oportunidad completó los 90 minutos: en el 0-0 contra Huracán, en noviembre de 2024.
Miramón en el entrenamiento de Boca en Ezeiza.
Un final anticipado
Ahora bien, el préstamo de Nacho incluía una cláusula que obligaba a Boca a comprarlo si llegaba al 70% de los partidos. Un objetivo que hoy claramente está lejísimos. De hecho, hace seis meses que no juega. Pero independientemente de eso, y a 15 días exactos del final, el ciclo de un año y medio se cerrará sin sorpresas.
En junio se extendió el préstamo, pero el final fue el mismo.
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