La directora del Pami Misiones, Ninfa Alvarenga, comenzó la semana pasada con despidos de personal del organismo, a la par que desde el gremio y los trabajadores se denuncian “dramáticos” recortes en las prestaciones médicas y sociales.
Si bien, el Pami Misiones no publicita sobre estas decisiones, fuentes del organismo manejado por Alvarenga precisaron a La Voz de Misiones que desde la semana pasada suman cinco los trabajadores despedidos.
“Hay dos en Posadas; uno, en San Vicente; uno, en Iguazú; y uno, en Eldorado”, detallaron.
Según señalaron a LVM, en el caso de Puerto Iguazú se da el absurdo de que, al despedir a la única trabajadora de la delegación, Alvarenga dispuso su reemplazo por personal enviado desde Posadas, con todo lo que significa en materia de traslado, alojamiento y viáticos.
“En términos presupuestarios resulta más caro reemplazar a la trabajadora despedida que mantenerla en su puesto”, argumentó una fuente del área contable del organismo, que sobrevivió a la debacle de los audios filtrados y la caída en desgracia de la anterior administración libertaria, encabezada por el médico Paulo César Zárate Ninamango, con Ricardo Zacarías y Sixto Cástor Fernández, todos ahora involucrados en una causa penal contra Alvarenga en la Justicia Federal.
Clima tenso
Desde el Sutepa, el Sindicato Único de Trabajadores y Empleados del Pami, la dirigencia local manifestó a LVM que el gremio se mantiene “expectante” de los acontecimientos en curso y “dispuesto a enfrentar” la motosierra libertaria de Alvarenga en el organismo.
El gremio describe, asimismo, el ambiente laboral en el Pami Misiones como “tenso” y dice contabilizar episodios de “hostigamiento” del personal por parte de Alvarenga y su círculo íntimo.
“La relación de Ninfa con el empleado de Pami es tensa, hay hostigamiento, miedo”, comentó a LVM un delegado gremial de la sede Posadas.
Sobre la lógica de las desvinculaciones, desde el Sutepa Misiones, la ven como un “contrasentido” en relación con la actual plantilla de personal que contabiliza 127 empleados distribuidos en toda la provincia.
“En Misiones no sobra gente. Al contrario, falta gente”, apuntan y señalan: “En la gestión anterior se jubilaron un montón. En la gestión de (Mauricio) Macri hubo un retiro voluntario y muchos se acogieron”.
El gremio dijo no haber detectado que Alvarenga haya reemplazado ninguno de los puestos de los despedidos por nuevo personal de su espacio político, aunque no desestima que la referente libertaria pretenda llenar los casilleros vacíos con sus militantes.
De hecho, entre el torrente de declaraciones que explotó con la causa judicial por los audios filtrados, se habló de “promesas” de empleo público de Alvarenga a sus partidarios de Posadas y el interior.
Los mismos denunciantes, Zacarías y Fernández, relataron que Alvarenga pretendía que la gestión del médico Zárate Ninamango pasara la motosierra a la nómina de funcionarios, para “meter a su gente”.
Bicicleta
A los despidos en serie, la administración libertaria del Pami Misiones le suma cuestionamientos por recortes en materia de prestaciones médicas y sociales, que vienen siendo denunciadas por los mismos afiliados y sus organizaciones.
Si bien los recortes no son responsabilidad de la directora local, sino una política nacional del organismo que funciona en la órbita de la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, la caída de la cobertura y los beneficios contrasta con la publicidad que Alvarenga hace de su gestión en sus redes y las del Pami.
“Los recortes son muchos”, indicó a LVM el delegado sindical. “En todo lo que es fisiatría, camas, sillas de rueda, colchones, a esta mitad de año no hay nada”, graficó.
“No se hicieron ajustes de los subsidios sociales, a los que están en situación de postración le siguen pagando ayudas de $8.500”, apuntó.
El delegado habló también de “bicicleteo” en la provisión de medicamentos. “Le buscan el pelo a la sopa, van dilatando, demorando, los oncológicos, y dando de baja del Vademécum medicamentos que antes figuraban como esenciales y ahora los empezaron a cobrar”, explicó.