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(CNN) — El expresidente Donald Trump invitó este sábado a varios líderes musulmanes al escenario junto a él en un mitin de campaña en Michigan mientras corteja a votantes árabe-estadounidenses y musulmanes desilusionados o enojados por la política de EE.UU. sobre Israel y Gaza en este estado clave para las elecciones.
«Podrían inclinar la elección de un lado o del otro», dijo Trump en el suburbio de Detroit, Novi, ubicado a unos 30 minutos de Dearborn, que el año pasado se convirtió en la primera ciudad de mayoría árabe en EE.UU.
Trump dijo en su discurso que había mantenido una reunión más temprano en el día con líderes musulmanes. Estuvo acompañado en el escenario por lo que su campaña describió como «líderes prominentes de la comunidad musulmana de Michigan», incluido el Imam Belal Alzuhairi, quien describió a Trump como el candidato de la «paz».
«Nosotros, como musulmanes, apoyamos al presidente Trump porque promete paz, promete paz, no guerra», dijo Alzuhairi. «Estamos apoyando a Donald Trump porque prometió poner fin a la guerra en el Medio Oriente y Ucrania».
Trump ha criticado la guerra de Israel en Gaza por motivos de relaciones públicas, diciendo que el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, y sus fuerzas armadas necesitan «terminarlo rápido». También ha criticado al presidente Joe Biden y a la vicepresidenta Kamala Harris por no apoyar adecuadamente a Israel, aunque el Gobierno actual, y la campaña de Harris, en gran medida se han negado a criticar a Israel o considerar detener los envíos de armas al país.
En una entrevista con el presentador de radio conservador Hugh Hewitt en el primer aniversario de los ataques de Hamas del 7 de octubre de 2023 dentro de Israel, Trump reflexionó sobre las perspectivas inmobiliarias en la asediada Gaza, hogar de aproximadamente 2 millones de palestinos.
«Sabes, como desarrollador, podría ser el lugar más hermoso: el clima, el agua, todo, el clima», dijo Trump. «Podría ser tan hermoso».
Durante su primer mes como presidente, en 2017, Trump emitió una orden ejecutiva que prohibía la entrada durante 90 días a ciudadanos de siete países de mayoría musulmana: Iraq, Siria, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen. La orden prohibía indefinidamente a los refugiados sirios y bloqueaba a todos los refugiados de ingresar a EE.UU. durante cuatro meses. (Después de una larga batalla judicial, la «prohibición de viaje» sobrevivió en parte. Biden revocó las órdenes en 2021 inmediatamente después de asumir el cargo).
Sin embargo, la campaña de Trump y sus aliados han buscado aprovechar la ira árabe-estadounidense y musulmana por el continuo apoyo de EE.UU. a la campaña militar de Israel en Gaza y, más recientemente, en el Líbano, criticando a Harris y Biden desde ambos lados, diciendo a los votantes anti-guerra que Trump aseguraría la paz y afirmando a los votantes pro-Israel que los demócratas no los respaldan.
Trump ha cuestionado frecuentemente por qué los judíos estadounidenses considerarían votar por Harris, diciendo repetidamente que los demócratas judíos «deberían hacerse un examen de cabeza». En un evento en septiembre anunciado como oposición al antisemitismo, incluso advirtió que «el pueblo judío tendría mucho que ver» con su posible derrota en noviembre.
Harris, quien ha pedido un alto el fuego en Gaza y ha dicho que apoya una solución de dos estados en la región, ha recibido más críticas de activistas propalestinos y antiguerra, quienes le han suplicado que se distancie de Biden y diga que apoya condicionar la ayuda militar a Israel.
Durante una breve reunión hace tres semanas en Flint, Michigan, un grupo de defensores y líderes árabe-estadounidenses presionó a Harris «para mostrar distancia entre cómo gobernaría en este asunto con las políticas actuales del Gobierno, con las que no estamos de acuerdo», como Wa’el Alzayat, CEO del grupo de defensa musulmán-americano Emgage Action, dijo a CNN después.
Trump en su mitin este sábado afirmó que «judíos, católicos, evangélicos, mormones, musulmanes se están uniendo a nuestra causa en mayor número que nunca antes y ahora está sucediendo lo más maravilloso».
«Los votantes musulmanes y árabes en Michigan y en todo el país quieren detener las guerras interminables y un regreso a la paz en el Medio Oriente. Eso es todo lo que quieren», dijo Trump.
Trump también, nuevamente, utilizó la reciente campaña de Harris junto a la exrepresentante de Wyoming Liz Cheney, cuyo padre, el exvicepresidente Dick Cheney, fue uno de los principales arquitectos de la invasión de Iraq por parte de EE. UU. y la guerra de años que siguió. Ambos Cheney han respaldado a Harris.
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