El Génesis es uno de los textos más antiguos y estudiados de la historia. Desde sus primeras líneas, surgen relatos que hablan sobre la Creación y el propósito del ser humano en el Edén. Para el catolicismo no existen dudas sobre este episodio. Pero, para otras religiones, hay interpretaciones más diversas.
“Y de la costilla que Dios tomó del hombre, hizo una mujer, y la trajo al hombre. Dijo entonces Adán: Esto es ahora hueso de mis huesos y carne de mi carne; ésta será llamada Varona, porque del varón fue tomada. Por tanto, dejará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su mujer, y serán una sola carne” (Génesis, 2, 22-24).
El texto deja poco lugar a las dudas sobre la Creación y sobre el origen de la mujer, según la Biblia. Pero un texto anterior (“Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó” (Génesis, 1, 27) ha sido interpretado por el judaísmo como indicativo de que otra persona fue la primera mujer.
Es allí donde aparece Lilith, quien según la tradición judía precedió a Eva y, una vez alejada de Adán, se convirtió en un demonio que rapta a los niños durante la noche, como una encarnación del adulterio.
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Lilith: La enigmática mujer antes de Eva en la tradición bíblica
Un artículo del diario madrileño ABC asegura que “más allá de esta tradición hebrea, el origen del mito de Lilith parece contar con raíces sumerias o acadias. En concreto, había en Mesopotamia un grupo de demonios femeninos derivados de una criatura conocida como Lilitú”.
“Esta tradición habría pasado más tarde a la cultura judía a través de los semíticos residentes en Babilonia. Los judíos adaptaron así al hebreo el nombre de esta criatura maligna hasta vincularlo posiblemente a la palabra laila (traducida como noche)”, agrega el artículo.
Lilith ha sido representada de distintas formas a lo largo de la historia.
Lo cierto es que el nombre Lilith aparece una sola vez en la Biblia, precisamente en Isaías 34,14: “Los gatos salvajes se juntarán con hienas y un sátiro llamará al otro; también allí reposará Lilith y en él encontrará descanso”.
Como el fragmento del Génesis (1,27) corresponde al sexto día de la Creación, muchos se preguntan si, en verdad, Lilith sería anterior a la propia Eva, aunque no se la mencione de manera expresa.
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Un artículo de la BBC deja abierta las lecturas a dos grandes interpretaciones. Por un lado, dice, “ese ser creado primero era andrógino, una criatura que era hombre y mujer simultáneamente y que fue separada después. Otra lectura es que hubo dos Eva: a Adán no le gustó la primera y Dios la reemplazó con otra más satisfactoria”.
De todas formas, para los católicos, Lilith no es más que un mito. “Lilith sería una especie de diosa conocida por sus actividades diabólicas, que resultaría especialmente peligrosa para las mujeres que daban a luz, al consumir la sangre y los tuétanos de los hijos. Para protegerse de los ataques de Lilith, se recurría, en el mundo pagano, a encantos y amuletos”, explica un artículo de Catholic.net.
Quién fue Lilith. Foto: Freepik
Agrega que es “incorrecto decir, como se hace en algunas interpretaciones recientes, que exista una narración en el libro del Génesis sobre una Lilith creada como mujer antes incluso que Eva. La importancia bíblica de este personaje es, por lo tanto, mínima”.
Admite, sin embargo, que “en el mundo de la cábala y de las interpretaciones judías, Lilith adquirió cierta importancia y se elaboraron sobre ella diversas teorías, en general condenatorias, al ver en ella una especie de demonio maligno. El Talmud presenta a Lilith con rostro de mujer, largos cabellos y un cuerpo dotado de alas. En otro contexto interpretativo se habla de Lilith como la primera mujer de Adán, que no aparece en el Génesis”.
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