En un acto que contó con el tradicional marco histórico mezclado con danzas de ritmos que tienen que ver con los inmigrantes y un cierre musical de primera línea, la localidad de Leandro N. Alem celebró sus 98 años en el escenario montado en el predio de la Navidad, epicentro de las actividades conmemorativas.
A las 20 de ayer, comenzó la presentación del locutor oficial Marcelo Bongers, quien hacía una introducción al momento para dar pie en primer lugar a la entrada de las banderas portadas por integrantes de la Unidad Regional VI de Policía, los Bomberos Voluntarios, los veteranos de Malvinas y colectividades locales.
Luego de la entonación del himno nacional, la diputada María Heidy Schierse entregó al intendente, Matías Sebely, una declaración de la Cámara de Diputados de Misiones referida al aniversario de la ciudad y posteriormente el docente local Ricardo Swier, bisnieto de uno de los primeros pobladores de la zona, tuvo a su cargo las palabras alusivas.
El subsecretario de gobierno de la provincia, Daniel Behler, llevó a la mediterránea ciudad los saludos del gobernador Hugo Passalacqua y resaltó la importancia de Alem en la provincia con su “espíritu emprendedor y fiestas que enorgullecen a todos”.
A su término, Sebely se dirigió a los presentes manifestando su “orgullo por haber nacido en Alem” haciendo alusión a que sus padres llegaron a la ciudad en la década de 1980 “en una oleada de profesionales que venían a buscar una oportunidad y la encontraron, yo soy hijo de esos nuevos inmigrantes”.
Por otra parte, resaltó tres ejes fundamentales a la hora de definir a su ciudad empezando por la fé y espiritualidad marcada por la Fiesta Nacional de la Navidad; la logística existente siendo la localidad con más transporte de carga en la región respecto a sus habitantes de todo el nordeste argentino y por último el gran espíritu emprendedor poniendo de ejemplo que en la ciudad “se elabora el 90 por ciento de todo el packaging de yerba mate que circula por Argentina y el mundo”.
Show musical
Como broche de oro del festejo por el 98 aniversario de la imposición del nombre a la ciudad, el escenario principal contó con la presencia del músico Roman Ramonda, que con su particular estilo hizo vibrar a los presentes.
En un recorrido que fue desde lo melódico pasando por ritmos de tango y el siempre contagioso acorde de chacareras, sambas o chamamé el músico pampeano junto a su orquesta demostró en la tierra colorada porque tiene en su vitrina reconocimientos de todo tipo hasta de la cuna del folklore, Cosquín.