Misiones
También se detectan casos de sobrepeso y obesidad
Prosame: las afecciones bucodentales continúan siendo las más detectadas
Con el comienzo del ciclo lectivo, el Programa de Salud Misionera Escolar (Prosame) retomó sus actividades en las escuelas de la provincia. A partir de este año, el programa se implementa como una estrategia local, fortaleciendo el trabajo en las seis zonas sanitarias. Desde el Ministerio de Salud Pública y en articulación con el Consejo General de Educación, se priorizan las instituciones que atienden a poblaciones vulnerables, poniendo énfasis en los controles médicos integrales de los niños.
Durante las visitas a las escuelas, el equipo de salud detectó principalmente afecciones bucodentales, sobrepeso y obesidad en los estudiantes. Además, se identificaron dificultades oftalmológicas, problemas del lenguaje, trastornos de aprendizaje y alteraciones conductuales vinculadas, en algunos casos, al uso excesivo de pantallas. El objetivo es garantizar el acceso a los controles médicos y promover hábitos saludables en la infancia.
“Desde el lanzamiento del programa el 12 de marzo, trabajamos en las seis zonas sanitarias con una programación conjunta con Educación. Nos enfocamos en las escuelas que atienden a niños vulnerables, priorizando a los de primer y sexto grado. Lo que encontramos como patología predominante es la odontológica, por eso cada equipo incluye un odontólogo que realiza la exploración, enseña técnicas de cepillado y gestiona los turnos de derivación para los casos detectados”, explicó Guillermo Rolón, referente del Prosame.
Según detalló, además de los problemas odontológicos, se observa un porcentaje importante de sobrepeso y obesidad, que alcanza entre el 25% y el 30% de los alumnos evaluados. En menor medida, también se registran dificultades en la visión y casos de trastornos del lenguaje y conducta.
En relación a la higiene bucal, el profesional señaló que uno de los factores que incide en la aparición de patologías es la interrupción de los controles de salud a partir del cuarto o quinto año de vida, lo que lleva a la pérdida de hábitos como el cepillado regular.
Prevención
En este contexto, los equipos de salud no sólo realizan la detección, sino que además promueven actividades de promoción de hábitos saludables, como talleres de higiene bucal y prevención del sobrepeso. En las escuelas, trabajan con tutores y docentes para instalar prácticas de cuidado, especialmente en los niños de primer grado, donde los odontólogos hacen énfasis en la protección del primer molar permanente. A su vez se hace entrega de cepillos para los estudiantes.
“El Prosame nos permite volver a captar a ese niño que dejó de asistir a los centros de salud. Es fundamental crear nuevamente el hábito de higiene bucal, explicar por qué es importante, y que los chicos tengan su cepillo. Trabajamos en conjunto con los odontólogos, que insisten mucho en la prevención, sobre todo en el cuidado del primer molar en los niños que inician la primaria”, manifestó Rolón.
Hasta el momento, el programa visitó diez escuelas de la zona capital, incluyendo establecimientos de Posadas, Santa Ana y Corpus, y se extiende a localidades del interior como Eldorado y Campo Grande. Cada alumno evaluado recibe un formulario digital que registra el control integral realizado, incluyendo las derivaciones necesarias a especialistas como oftalmólogos, odontólogos o nutricionistas.
A futuro, el Prosame proyecta fortalecer el área odontológica, aumentando la entrega de cepillos dentales y ampliando la cobertura. Además, trabaja en alianzas estratégicas con fundaciones, hospitales y universidades para incorporar más profesionales al seguimiento de niños con trastornos del lenguaje y del comportamiento. El objetivo es asegurar una atención integral y sostenida en el tiempo, garantizando que cada niño detectado con una afección acceda al tratamiento correspondiente.
Por su parte, Hilda Morales, jefa del Servicio de Odontología del Hospital Barreyro, remarcó que la primera consulta odontológica debe realizarse al salir el primer diente, ya que “no podemos hablar de salud total sin salud bucal, y por eso es fundamental el cuidado dental desde la infancia”.
Además, recomendó realizar controles odontológicos cada seis meses y destacó que el cepillado debe hacerse cuatro veces por día, asegurándose de limpiar todas las caras de los dientes.
Entre los errores más frecuentes detectados, la jefa del servicio indicó la falta de importancia que muchas familias otorgan al cepillado y a los controles, ya que “traen a los niños cuando ya presentan dolor o caras hinchadas”.
PEl Barreyro atiende a 300 chicos al mes en odontología
0%
0%
0%
0%
0%