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No fue una frase aislada, no fue una declaración al azar. El “Boca es más candidato” que Independiente que deslizó Julio Vaccari una vez concretada la clasificación a los cuartos de final del Torneo Apertura de la Liga Profesional tiene un trasfondo, tiene un motivo y tiene una lógica de hierro. Es cierto que hizo ruido en Avellaneda, es cierto que llamó la atención a más de un hincha, pero forma parte de un libreto al que se viene pegando desde el inicio de la temporada.
El libreto de Julio
Con un ojo puesto en el partido clave de mañana contra Guaraní por la Copa Sudamericana y el otro en el derbi, el entrenador del Rojo se sacó la chapa en la última conferencia de prensa tras el triunfo con Independiente Rivadavia en el Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini y, aferrándose a su libreto, remarcó que el Xeneize “siempre va a ser candidato” y que al tener “una sola competencia” es aún “más candidato” que antes.
Los dichos del conductor del plantel profesional no fueron una chicana contra el rival del lunes en la Bombonera. Para nada. No es su estilo, no es su forma. Lejos de entrar a un juego al que no quiere ser invitado, Vaccari continuó con la estrategia discursiva que viene implementando desde que su equipo empezó a ser visto de otra manera, con otros ojos.
El trasfondo
Más allá del sueño de los hinchas y la expectativa que se generó por los resultados obtenido y el nivel futbolístico, Julio siempre se encargó de bajar la espuma y tener mesura. “La esencia de hincha está en ilusionarse, yo soy de ir de forma progresiva”, fue una de las primeras declaraciones que dio, allá por febrero, cuando Independiente tuvo un inicio arrollador y estaba en lo más alto de la Zona B.
Esta no fue la primera vez que lo nombró a Boca como uno de los favoritos a quedarse con el título de la Liga Profesional. Cuando el Xeneize todavía era dirigido por Fernando Gago y estaba cerca de disputar la Fase 2 de la Copa Libertadores ante Alianza Lima (luego quedaría eliminado), él lo posicionó junto a River y Estudiantes como candidatos porque “son los que pueden salir al mercado a comprar lo que quieran”. Y remató: “Vos podés comprar por dos pesos y ellos por cien millones”.
Vaccari tiene un estilo muy marcado como entrenador en el banco de suplentes y también sentado frente a los micrófonos. Su idea no pasa por bajarle el precio a sus jugadores (por el contrario, los suele elogiar en cada oportunidad que tiene) o a la camiseta tan pesada como la del Rojo, si no que se trata de seguir quitándole la responsabilidad de salir campeones a sus dirigidos, entendiendo que es una tarea muy difícil. Claro, hace más de 22 años que el club no puede coronarse en un campeonato local.
No suelta la Boca y seguirá aferrado a su libreto.
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