Ciberfraude: nadie está exento
- Creado: 19 Mayo 2025
El incremento de la utilización masiva del internet y por consiguiente la amplia variedad de actividades que realizamos a través de la web devinieron en el aumento de lo que hoy llamamos: ciberfraudes.
Los ciberfraudes constituyen una amplia variedad de actividades, desde estafas online hasta robos de datos y ataques cibernéticos.
A raíz del aislamiento impuesto por la pandemia en el año 2020 se generó como consecuencia inmediata el aumento exponencial de fraudes cometidos a través de internet, como ser:
- Skimming: es el robo de datos de la tarjeta en los cajeros automáticos para la clonación, a través de la colocación de dispositivos en los cajeros con el objetivo de copiar la banda magnética o el pin de la tarjeta y clonar la misma.
- Phishing: constituye una maniobra de ataque que intenta obtener dinero o datos sobre la identidad de un tercero a través del engaño o persuasión por correo electrónico, haciendo que divulgue información personal en sitios web que fingen ser sitios legítimos (como números de tarjeta de crédito, información bancaria o contraseñas).
- Pharming: similar al phishing, pero mientras éste se realiza especialmente mediante correo electrónico, el pharming es a través de páginas web fraudulentas. Dejamos a disposición un ejemplo del mismo: una persona está buscando información en internet y hace clic en un sitio que parece ser conocido, de confianza, sin embargo esa dirección está manipulada, es una página melliza, porque se suplanta el sistema de DNS, nombres de dominio. En este caso el usuario cree que está accediendo a una plataforma de compra conocida, pero realmente está accediendo a la IP de una página web falsa.
- Scamming: son correos electrónicos que convencen al usuario para que proporcione sus datos personales y cuentas bancarias como también persuadirlos para que envíen dinero al ofrecer oportunidades como viajes; promociones; trabajos; cobrar una herencia de un familiar desconocido que falleció en otro país; ayudar a una persona que busca refugio y pide una donación, entre otras-
- Suplantación de la identidad: la victima otorga todos sus datos al autor del delito, por ejemplo, a través de una compra online. Al mismo tiempo, a través de la obtención de los datos se podrían generar estafas subsiguientes, lo que implica un doble perjuicio.
La prevención de fraudes financieros cibernéticos implica una combinación de precaución, educación y medidas proactivas, por este motivo dejamos a disposición una guía de prácticas preventivas ante estos delitos:
Nadie se encuentra exento de ser víctima de un ciberfraude, es por esto que, con el objetivo de generar consciencia adjuntamos un caso real: