Iguazú (LaVozDeCataratas) Autoridades y especialistas en seguridad encendieron una señal de alarma ante la confirmación del ingreso al país de una droga de altísimo riesgo: el Captagón. Esta sustancia, asociada históricamente a grupos terroristas de Medio Oriente y a poderosos cárteles del narcotráfico, estaría siendo comercializada y distribuida en la región de la Triple Frontera, entre Argentina, Brasil y Paraguay, una zona señalada como foco de actividad ilícita transnacional.
El Captagón, también conocido como «la cocaína de los pobres», es una droga sintética que combina anfetamina y teofilina. Originalmente desarrollada en Alemania para tratar trastornos como el déficit de atención, fue prohibida en 1986 debido a su alto potencial de abuso. En la actualidad, se produce ilegalmente en Medio Oriente y es utilizada por grupos terroristas y bandas criminales debido a sus efectos: inhibe el miedo y el dolor, permitiendo a quienes la consumen actuar con una violencia desinhibida y sin temor a las consecuencias físicas .LA NACION
El especialista en antiterrorismo urbano, Daniel Adler, confirmó que esta sustancia ya circula en territorio argentino, principalmente en Misiones. Según explicó, su efecto principal es la supresión de emociones como el miedo, convirtiendo a quienes la consumen en individuos más decididos y peligrosos al momento de cometer delitos .Cadena 3 Argentina
La Triple Frontera, que incluye a Puerto Iguazú, Foz do Iguaçu y Ciudad del Este, ha sido identificada como un punto crítico para el ingreso de esta droga al país. Adler advirtió que en esta zona operan grupos como Hezbollah, el Primer Comando Capital (PCC) de Brasil y los cárteles mexicanos de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, lo que aumenta el riesgo de que el Captagón se distribuya y utilice en actividades delictivas en Argentina .Primera Edición
Las autoridades locales y nacionales están en alerta y trabajan en conjunto para prevenir la expansión de esta peligrosa sustancia en el país. Se insta a la población a mantenerse informada y a reportar cualquier actividad sospechosa a las fuerzas de seguridad.