Iguazú (LaVozDeCataratas) En los últimos días, dos episodios encendieron la alarma en instituciones educativas de Iguazú, poniendo en evidencia la necesidad urgente de reforzar el acompañamiento familiar, escolar y comunitario de niños y adolescentes.
Por un lado, una comisión policial debió intervenir en la Escuela Bachillerato Técnico (Bachitur), tras la denuncia de que un alumno de 15 años había asistido a clases portando un machete. El joven explicó que lo llevaba consigo «para defensa propia», aunque no amenazó ni agredió a ningún compañero ni docente.
En otro establecimiento, el BOP N.º 89 del barrio Santa Rosa, un alumno de 14 años fue sorprendido exhibiendo a sus compañeros tres envoltorios con una sustancia que resultó ser cocaína. Si bien el contenido no arrojó peso en la balanza de precisión, se procedió al secuestro del estupefaciente y el menor fue entregado a su progenitor. La Justicia ordenó iniciar actuaciones bajo trámite ordinario.
Ante estos episodios, desde la Policía de Misiones se intensificaron las charlas de prevención en escuelas. Estas jornadas están dirigidas a alumnos, padres, docentes y directivos, y abordan temas como bullying y ciberbullying, uso responsable de redes sociales, violencia escolar, normas de convivencia y el manejo de emociones y responsabilidades compartidas entre escuela y familia.
Durante los encuentros se hizo hincapié en la importancia del rol de los padres en la formación y contención de sus hijos, y se planteó la necesidad de trabajar en conjunto para prevenir peleas tanto dentro como fuera de los establecimientos educativos. En algunas escuelas, los propios tutores se ofrecieron a formar comisiones de padres para colaborar activamente con los equipos directivos.
Los hechos reflejan una realidad compleja que atraviesa a las instituciones escolares y que requiere una respuesta integral, donde las medidas de seguridad se acompañen de acciones sostenidas de prevención, contención emocional y educación en valores.