La referente del Partido Libertario en Misiones, Úrsula Waidelich, denunció públicamente un presunto fraude en el proceso de carga de datos de las recientes elecciones provinciales para diputados. Según explicó, durante el escrutinio definitivo realizado en la semana posterior a los comicios, el cotejo de actas entre los partidos y los presidentes de mesa se desarrolló con normalidad, sin irregularidades significativas y con resultados firmados por todos los fiscales presentes. Sin embargo, apuntó contra el procedimiento llevado a cabo durante la carga final de los datos, realizada el viernes por la noche, una vez finalizado el recuento.

“Durante esos dos días (jueves y viernes) de control, todo se hizo correctamente. Si bien se recuperaron algunos votos observados, la mayoría fueron para la oposición y muy pocos para el partido renovador. De hecho, en las más de 60 mesas que revisamos, apenas tres votos fueron para la Renovación”, afirmó Waidelich. “En un total de 6.000 votos observados que había, es imposible que en dos días se hayan recuperado 4.400 votos que ellos ahora se adjudican para quedarse con esa banca número 21 en la Cámara”, añadió.

La dirigente denunció que, por primera vez, durante la carga de datos del viernes por la noche, no se permitió el ingreso de apoderados ni representantes de los partidos políticos al sistema informático. “Lo hicieron solos, a puertas cerradas. Y casualmente, después de unas horas, apareció una banca más para el oficialismo que no estaba en disputa. Nosotros teníamos una ventaja de 350 votos en las planillas firmadas por todos los fiscales”, señaló.

Según Waidelich, esta alteración no solo afecta al Partido Libertario sino a toda la ciudadanía: “Esto no es que se lo robaron a un partido, se lo robaron a los misioneros. Les quitaron el derecho a elegir quién los representa en la Legislatura”.

La dirigente libertaria anunció que este martes—primer día hábil tras el fin de semana largo— se presentará la denuncia formal con todas las planillas firmadas por fiscales, apoderados y delegados judiciales. “No nos vamos a callar. Tenemos las pruebas y los números. Queremos saber dónde están esos votos que no aparecen en nuestras actas”, enfatizó.

Para Úrsula, “en Misiones no existe la democracia. Si existiera, estas cosas no pasarían. El gobierno provincial hace lo que sea para quedarse con el poder. Y esto es gravísimo. Espero que cada vez más misioneros se den cuenta de lo que está ocurriendo y participen en cada elección”.

La denuncia se suma a una creciente tensión postelectoral, en un contexto de reclamos por mayor transparencia en el sistema electoral y garantías para que la voluntad del electorado sea respetada en su totalidad.